Un ingeniero, un ex convicto y un empleado de la empresa que está a cargo de la seguridad del country Altos de la Ribera fueron imputados este viernes, acusados de formar parte de una banda de ladrones, cuya especialidad es el robo de cajas fuertes.
Aunque no fue ventilado durante la audiencia imputativa, fuentes privilegiadas confirmaron que los prófugos, uno de ellos chileno, estuvieron presos en Rosario el mes pasado por el atraco a una joyería y recuperaron la libertad con un fiador de renombre: Leonardo Andrés Peiti.
Un ingeniero, un ex convicto y un empleado de la empresa que está a cargo de la seguridad del country Altos de la Ribera fueron imputados este viernes, acusados de formar parte de una banda de ladrones, cuya especialidad es el robo de cajas fuertes.
Durante la audiencia, que estuvo a cargo del juez penal Gustavo Urdiales, las fiscales María Lucila Nuzzo y María Gabriela Arri, informaron que hay dos prófugos -uno de nacionalidad chilena-, y un sexto hombre cuya identidad se desconoce hasta el momento.
Todos ellos, habrían formado parte de un hecho cometido durante le fin de semana largo de Carnaval, en el mencionado barrio privado de Santo Tomé, del cual sustrajeron una caja fuerte con una importante suma de dinero en pesos y en dólares, un arma de fuego 9mm marca Tanfloglio, un reloj Rolex Presidente, joyas y documentación personal de las víctimas, como libreta de matrimonio y partidas de nacimiento de los hijos. También artículos varios de electrónica.
Aunque no fue dicho durante la imputativa, fuentes privilegiadas refirieron que los dos prófugos, el rosarino Ezequiel Sebastián Bárcena (31) y el chileno Mirko Fuentes Olave (29), recuperaron la libertad bajo alternativas el mes pasado, luego de que fueran acusados por el intento de robo a una joyería de la calle Córdoba al 1400 de Rosario.
Lo llamativo en ese caso fue que ambos recuperaron la libertad bajo fianza, para la cual de presentó en la carpeta judicial una persona cuyo nombre se encuentra fuertemente ligado a uno de los últimos escándalos judiciales ocurridos en la jurisdicción rosarina.
El fiador es nada menos que Leonardo Andrés Peiti, "Leo", como lo llaman al "Zar del Juego Clandestino" que el año pasado se vio involucrado en una trama de corrupción que se llevó del cargo y puso tras las rejas al fiscal Regional de Rosario Patricio Serjal, junto con el fiscal Gustavo Ponce Asahad.
El nombre de Leo Peiti, quien enfrenta -en libertad- varias causas por juego clandestino en Melincué y ciudades satélite, aparece en una planilla oficial cubriendo una fianza de $ 40.000 el 25 de febrero de 2021, es decir, al día siguiente de que fueran imputados y recuperaran la libertad Fuentes Olave y Bárcena.
El 24 de febrero, el juez rosarino Facundo Beccerra, le concedió la libertad bajo alternativas a ambos, luego de que el abogado defensor Angelo Rossini se opusiera al planteo de prisión preventiva por 90 días del fiscal Franco Carbone, que los imputó por "robo calificado por escalamiento en grado de tentativa".
El hecho por el cual fueron detenidos se produjo el 22 de febrero en una joyería de la calle Córdoba al 1400 de Rosario.
Los días previos y durante el fin de semana de Carnaval -13 al 16 de febrero- fueron denunciados tres robos a countries de Santo Tomé: dos en Altos de la Ribera y uno en El Paso. La modalidad en los tres casos fue el ingreso en momentos en que no había nadie en las propiedades.
Aunque no se descarta que todos estén vinculados a la misma banda, la fiscalía cuenta por el momento, con elementos para atribuirle solamente uno de los robos, tal vez el de mayor envergadura. Se trata del ingreso a una casa ubicada sobre el bulevar central del barrio, forzando una puerta ventana del primer piso, de donde se llevaron una caja fuerte completa, entre otros objetos personales.
Las tareas de inteligencia comenzaron ese fin de semana tras la denuncia y trascendieron críticas hacia el sistema de seguridad privada, con cámaras y sensores de movimiento que no funcionaban, luces quemadas en el perímetro y tramos del alambrado en mal estado.
Sin embargo el dato clave surgió el viernes 4 de marzo, cuando una llamada anónima al 911 puso en alerta a los investigadores acerca de dónde podría estar la caja fuerte. A partir de ese momento y contrarreloj, se realizaron media docena de allanamientos, entre ellos a una agencia de cambio del microcentro, de donde se secuestraron objetos de interés para la causa dentro de una caja de seguridad a nombre de uno de los imputados.
En los allanamientos, realizados entre el 8 y el 11 de marzo, fueron detenidos tres hombres. Un ex convicto de la zona de Cañada de Gómez identificado como Damián Alejandro B.; un ingeniero santafesino -Germán Darío B.- y un empleado de la agencia de seguridad que presta servicios en el barrio cerrado -Marcelo Sebastián C.-.
El primero contó con la defensa de los abogados Angelo Rossini y Sebastián Gervasoni; el ingeniero por Sebastián Oroño y Sergio Martín; mientras que al guardia de seguridad privada lo asesoró Carlos Santiago Chena.
La imputación fue común para los tres por el delito de "asociación ilícita" (los dos primeros como organizadores y el último como miembro); y el robo doblemente calificado por haber sido perpetrado en poblado y en banda y por escalamiento", en calidad de coautores los dos primeros y partícipe necesario el tercero.
Además, como en los allanamientos a cada uno de los detenidos le fueron secuestradas armas de fuego, se les imputó por separado la tenencia ilegítima de arma de fuego de uso civil -en dos casos– y de guerra -en uno-.
Las fiscales Nuzzo y Arri, que contaron con la presencia del fiscal Regional Carlos Arietti, señalaron al juez Urdiales que se trata de una banda que funciona al menos desde enero de este año y que su despliegue abarca las ciudades de Santa Fe, Rosario y Cañada de Gómez. También refirieron que utilizaban numerosos vehículos -un Toyota Corolla, un VW Vento, un Chevrolet Prisma, una Renault Kangoo y un Peugeot gris-; además de armas y un poderoso equipamiento que incluye tubos de oxígeno y acetileno, utilizados presumiblemente para abrir las cajas fuertes.
En la misma audiencia adelantaron que dada la complejidad de la trama y por la existencia de numerosas medidas investigativas en trámite, solicitarán la prisión preventiva para los tres. Por acuerdo de partes, como se trata de un proceso en el que se ampliaron los plazos legales, la audiencia de prisión preventiva será el próximo martes 16 de marzo, en horario a confirmar por la Oficina de Gestión Judicial.