Domingo 12.11.2023
/Última actualización 14:12
Neuromielitis Óptica (NMO), una enfermedad del sistema nervioso central que a menudo se confunde con la esclerosis múltiple, causando tratamientos inadecuados y retrasos en el diagnóstico. Esta patología se considera una enfermedad rara, en la Argentina no hay números exactos de prevalencia y es variable en el mundo. La tasa establecida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) oscila entre 1 y 4 casos por cada 100.000 individuos.
Esta enfermedad, también conocida como Enfermedad de Devic, afecta principalmente a personas de 30 a 40 años. Sus rasgos distintivos incluyen la afectación de los nervios ópticos y la médula espinal, manifestándose en problemas visuales, debilidad, y trastornos sensitivos”, explicó a El Litoral el neurólogo Francisco Varela (MN. N° 139048).
La NMO es una enfermedad autoinmuneSíntomas, causas y diagnóstico
Al tener predilección por los nervios ópticos y la médula espinal, los síntomas más comunes, según argumentó Varela, “incluyen pérdida de la visión, que puede ser temporal o permanente, debilidad o parálisis en las extremidades, trastornos sensitivos o pérdida de la sensibilidad, problemas en el habla y la deglución, incontinencia urinaria y fecal e incluso algunos pacientes pueden experimentar vómitos e hipo persistentes”.
La NMO es una enfermedad autoinmune que ataca erróneamente células determinadas del sistema nervioso central, la mayoría de las veces a los nervios ópticos y la médula espinal. “Esta enfermedad está fuertemente asociada a un anticuerpo llamado Anti aquaporina-4 (AQP4) y su detección es esencial para dar con esta patología”, dijo el profesional.
En cuanto al diagnóstico, el neurólogo aclaró que se basa en una combinación de síntomas clínicos: “resonancia de cerebro y médula espinal para identificar y caracterizar las lesiones y pruebas de laboratorio, incluyendo el anticuerpo AQP4”.
Síntomas de la enfermedadTratamiento
Si bien no existe cura para la enfermedad, un diagnóstico temprano puede prevenir el desarrollo de discapacidades severas. Actualmente existen buenas opciones de tratamiento. Para el mismo, hay diferentes estrategias: por un lado dirigida precozmente ante una recaída; por otro, un tratamiento crónico que tiene como objetivo prevenir cualquier otra recaída de la enfermedad.
A través de un enfoque terapéutico se busca reducir la inflamación y prevenir recaídas. En estos casos se utilizan “medicamentos inmunosupresores, como la azatioprina, el rituximab y el micofenolato, son comunes en el tratamiento de mantenimiento de esta enfermedad. Sin embargo, ante una recaída, se utilizan los corticosteroides y otras terapias como plasmaféresis para poder desinflamar las lesiones que causan”, informó Varela.
Las manifestaciones clínicas de cada recaída de la neuromielitis óptica, habitualmente son evidenciables con un daño anatómico que se corresponde en la imagen de la resonancia magnética.
Un diagnóstico temprano puede prevenir el desarrollo de discapacidades severasLa NMO puede tener un impacto significativo en la calidad de vida de quienes la padecen debido a la discapacidad y los síntomas debilitantes que conlleva. “La pérdida de visión y las discapacidades neurológicas pueden limitar la movilidad y la independencia, lo que afecta la capacidad de llevar una vida normal”, remarcó el entrevistado.
Por último, el neurólogo puntualizó que “el tratamiento y el apoyo adecuados son esenciales para ayudar a las personas que tienen esta patología a gestionar la enfermedad y mantener la mejor calidad de vida posible”.