Colón debe salir del agujero exterior y gritar ¡tierra! en el Mar
El Sabalero, que recuperó la punta en la fecha pasada, la pone en juego contra Aldosivi, uno de sus escoltas, en Mardel. Hace seis fechas que Colón no logra sumar de a tres lejos de Santa Fe. Va por TV pero por TyC Sports Play 3.
Madre de todas las batallas. Este Aldosivi-Colón aparece como una de esas "finalísimas" anticipadas camino a la gran final por un boleto a Primera División en Argentina. Colón debe modificar su paso cuando sale de Santa Fe. Crédito: Manuel Fabatía
A este Colón, la deuda externa lo come vivo. Hace un año que no pierde con nadie en Santa Fe, en el mítico Cementerio de los Elefantes, además que en la "B" le ganó a casi todos en el Brigadier López, con una eficacia de más del 83 por ciento de los puntos en juego en la ciudad de Garay. Pero, a la vez, siendo el mismo Colón, hace seis fechas que no gana afuera, desde ese 4-0 en Adrogué, casualmente con el mismo árbitro que lo pitará en el Minella este sábado a las 15: el sobrino de Federico Beligoy. Ahí, cuando es visitante, Colón tiene un agujero exterior que lo condena: perdió casi la mitad de los partidos (5 de 12), apenas ganó tres veces y el aporte afuera es muy pobre a la campaña global: apenas 36 por ciento de eficacia. Este sábado será, para el Sabalero, la madre de todas las batallas, sin tener que invadir Kuwait está obligado a ganar de visitante.
Ahora, resurrección en casa mediante (goleó a Estudiantes de Río Cuarto 3-0 y volvió a ganar después de cinco fechas), Colón vuelve a mirar a todos desde arriba antes que arranque la fecha 25 de una temporada incómoda y desgastante. El asterisco, claro está, se eliminará automáticamente este miércoles cuando el mismo Aldosivi visite la Isla Maciel para jugar sin gente contra San Telmo y así poner al día el campeonato. No se puede hacer futurología: pase lo que pase, el Colón de Iván Delfino debe empezar a pagar la deuda externa. Si bien el "Tiburón" sólo perdió una vez en el Minella, la realidad indica que en Mardel se empachó con empates (7) y sólo ganó 4 veces. O sea, nada de misión imposible. No es el Morumbí ni el Mineirao. Pero, como siempre, Colón depende de Colón.
Delfino repetiría el 11 que enfrentó al CADU.
De una, Iván Delfino pondrá en La Feliz para ser feliz a los mismos once que pasaron por arriba a los pitufos de Río Cuarto con el 3-0 en casa. Enfrente, Andrés Yllana recupera al "Loco" Carranza bajo los caños, debe acomodar la cueva por la lesión de Gonzalo Mottes (distensión de ligamento colateral interno y lesión del menisco externo de la rodilla izquierda) y podría cambiar la figura táctica si es que deja en el banco a Laméndola.
Colón tiene una idea fija: el Tiburón. Sin embargo, Aldosivi piensa por duplicado: "Si le ganamos a Colón y después a San Telmo sin gente, quedamos arriba y depende de nosotros". A las irregularidades que rodearon al estadio José María Minella en los últimos tiempos (tribuna clausurada, césped arruinado) se le sumó el reclamo de los municipales, por lo que se decidió "no arriesgar de noche" y el inicio del juego pasó de las 21 a las 15 del mismo día. Así, el partido más importante del campeonato de ascenso, el del puntero sabalero contra el escolta tiburón, irá por la tercera pantalla del canal de deportes y habrá que reeditar un Camel Trophy para poder encontrarlo en cada tele. Una vez más...viejo y querido fútbol argentino, nunca te entenderán.
"Delfino tiene más presión que nosotros", dice Lopes
Hernán Lopes, que volvió a la solidez defensiva al lado de Paolo Goltz, habló en "La Voz del Sabalero" (FM 91.5): "En las últimas fechas fue difícil porque no eran los resultados que esperábamos, de visitante o local nosotros queremos ganarles a todos, en una práctica, siempre. No se estaban dando las cosas, no se veían bien para afuera. El partido ante el CADU fue la primera piedra, arrancamos ganando y nos lo dan vuelta. Pero el equipo siempre estuvo unido sentimental y colectivamente, lo único que nos faltaba era ganar y hacer más de un gol".
Después de golear a Estudiantes de Río Cuarto, Lópes aseguró: "En el partido anterior como local Atlanta no nos habían llegado nunca, éramos dominantes, nos empatan en un rebote, con mala suerte. En los primeros partidos de Colón de local te metía un gol en los primeros minutos y eso te alivianaba los partidos, y ocurrió algo parecido contra Estudiantes de Río Cuarto. De los últimos cuatro goles que nos convirtieron tres fueron de rebote, hay que mirar para adelante, lo que pasó pasó, hay que mirar para adelante".
Finalmente, habló del DT: "Delfino trata de absorber toda la presión, tiene más presión que nosotros, lo maneja muy bien, capaz que se enoja, pero no se volvió loco, eso ayuda, de verlo enfocado. Es un grupo súper-sano, la gente grande es tranquila. No hay muchos egos. Uno lo ve a Christian Bernardi que salió campeón, hizo el gol más importante en la historia de Colón, y lo ves como si nada, es espectacular, es fácil para los que vienen a integrarse rápido".
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