Falcioni lo pide y Banfield endurece: "Si Colón quiere a Álvarez...que lo compre"
Es el único de todos los contratos que se termina ahora y la opción de compra total es de 1.900.000 dólares por el 90 por ciento de la ficha. ¿La rareza?: el préstamo de Banfield a Colón finaliza el 30 de junio, varias fechas antes del final.
De arco a arco. Así se gritó el "euro-gol" de Colón a Barracas Central en el Cementerio de los Elefantes: lo hace y lo grita Juan Pablo Álvarez; pero también "Nacho" Chicco bajo los caños sabaleros. ¿Qué hará Colón con este jugador?: Banfield sólo acepta la venta total. Crédito: Pablo Aguirre
Banfield, complicado con el descenso de categoría por su mala campaña en los últimos tiempos, apuró un nuevo retorno de Julio César Falcioni: cuarta etapa del DT que colgó la estrella en Peña y Arenales en el 2009. El "Emperador", que necesita hacer un muy buen mercado de invierno para mejorar al "Taladro" y evitar la pérdida de la categoría, mira todos los días para Santa Fe: lo quiere sí o sí de vuelta a Juan Pablo Álvarez, un jugador recuperado por "Pipo" y que viene de marcarle un golazo a Barracas Central en el Cementerio de los Elefantes. "Si no lo compran, el 1 de julio tiene que volver a Banfield", confiaron a El Litoral, por lo que se perdería varias fechas finales con la sangre y luto.
En un puñado de días, Colón debe responder por la opción de compra fijada hace un año cuando Julio César Falcioni lo pidió "sí o sí" como refuerzo para Colón 2022 en la Copa Libertadores de América. Ese plazo vence en un puñado de días: 1.900.000 dólares por el 90 por ciento de la ficha, con tres pagos pre-determinados en el contrato: 900.000 dólares a las 72 horas de ejercida la opción; 500.000 dólares a los 180 días; 500.000 a 270 días.
"La idea de Julio César Falcioni es tenerlo de vuelta cuanto antes, porque es su jugador preferido, por algo lo pidió ni bien llegó a Santa Fe como refuerzo en Colón. Es más, el préstamo firmado es hasta el 30 de junio, por lo que el 1 de julio debería presentarse en Peña y Arenales si Colón no lo compra", explicaron desde el sur. Si Banfield, que mira a Colón como competidor en la parte baja, aplica el reglamento "rabioso", las seis fechas finales no las jugaría para Colón, pero tampoco para Banfield. De mínima, la jugada de José Vignatti con Eduardo Espinosa (en caso de no comprarlo) es pedirle al presidente de Banfield, con quien mantiene un histórico y positivo vínculo, que extienda la relación por esas fechas finales.
El jugador está a gusto y muy cómodo con su familia en Santa Fe. "Juan Pablo se lleva muy bien con "Pipo", porque Gorosito lo recuperó: juega bien, hace goles y la gente ahora lo reconoce. Se quiere quedar, se lo dijo al DT y al presidente Vignatti antes y después del golazo a Barracas Central". ¿Podrá hacer Colón hoy esa inversión para comprar la ficha total de JP Álvarez?.
"Nadie lo va a admitir, pero Falcioni le dejó en claro a la dirigencia del Taladro que no quiere un nuevo préstamo de Banfield a Colón: o es venta total y sigue en Santa Fe; o se vuelva para Banfield, aunque el jugador quiera otra cosa", explica un allegado a la figura del "Emperador", que está redondeando su cuarta etapa como DT de Banfield.
Colón, que esperaba el dinero de los árabes por Tomás Chancalay (pegó la vuelta del equipo de "Juanchi" Pizzi para jugar en Racing), sabe que a mitad de año ingresarán millones. Los dirigentes sabaleros creen, por algunas charlas preliminares con la empresa europea que lo maneja al zaguero, que en un par de meses se ejecutará la cláusula de salida por Facundo Garcés: 2.5 millones de euros de pago contado furioso, sin comisiones ni porcentajes. Santiago Pierotti y Eric Meza también tendrían ofertas. Por lo tanto es un juego casi de ajedrez, porque "Pipo" pidió sí o si un "5" y un "10" de enganche para la segunda parte del año.
Un dato de color bien futbolero: más allá que la relación de Julio César Falcioni terminó de manera espectacular con los históricos dirigentes sabaleros, el "Emperador" ve en Colón una competencia directa con la parte baja de la tabla donde se necesitan los puntos para gambetear los tres descensos en esta temporada. Y en ese "jueguito" de intereses, directos e indirectos, quiere que Juan Pablo Álvarez salga de Colón y vuelva a Banfield. Por más que hoy, el autor del golazo a Barracas en el Brigadier López, entiende que "su lugar en el mundo" es Santa Fe con la rojinegra.
Desde lo estrictamente contractual, Colón le debe responder administrativamente a Banfield en un puñado de días qué hace con esa opción de compra por Juan Pablo Álvarez, fijada en 1.900.000 dólares por el 90 de la ficha y pactada en tres momentos de pago. Si es "sí" y Colón lo compra, final feliz para todos. Si es "no" a la compra, arrancará un nuevo capítulo, que es poder extender el vínculo de Juan Pablo Álvarez que vence el 30 de junio hasta el 30 de julio que es cuando termina la primera parte de la temporada futbolera en la Argentina.
¿Qué pasa con el uruguayo Neris?
El delantero uruguayo José Neris fue un pedido, exigencia y obsesión de Marcelo Saralegui cuando se armó el actual plantel sabalero. Los dirigentes le dieron el gusto: 650.000 dólares por el 60 por ciento de la ficha a River de Montevideo. Varios meses después, Neris ya ni juega y cuando ingresa no genera nada.
"Desde Colón nos manifestaron que querían rescindir el contrato pero no era lo que habíamos acordado. Y el tema del pago, no nos han pagado un solo peso desde que se hizo la operación", explicó por ADN Gol 96.7 el histórico dirigente del club uruguayo, Willy Tucci.
José Pablo Neris. Crédito: El Litoral
"Las explicaciones son por el tema dólar en Argentina. Lamentablemente no hemos tenido ninguna respuesta, así que estamos ya arrancando el tema FIFA. Es una lástima porque tenemos muy buena relación con Colón", agregó.
"Creo que estaría bueno intentar resolverlo amistosamente y no recurrir a FIFA. He hablado con José Neris y el quiere jugársela en Argentina y crecer en su carrera. Era goleador en Uruguay, por eso Colón lo fichó. El tiene un deseo enorme de triunfar allá", dijo Tucci.
Finalmente, el dirigente de River de Uruguay afirmó: "Me llamó en su momento el secretario de Colón y le mencioné que no estaba en Uruguay. No le escribí mucho a Vignatti pero entiendo las restricciones que hay allá y no quería meter presión, porque a veces no es que no se quiera sino que no se puede".
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