Luz amarilla para el pibe que recibe más foules en el fútbol argentino
Es doloroso y se lo está evaluando para saber si estará o no en condiciones de jugar el viernes ante Aldosivi en la Feliz. Las estadísticas son claras: es el que más gambetas hace y al que más le pegan.
Se encendieron las alarmas en Colón. Su jugador-estrella sufrió un traumatismo en el tórax y se esperará su evolución para saber si estará o no en condiciones de jugar el viernes en Mar del Plata. Generalmente, estas lesiones son dolorosas y poco habituales en el jugador. Pero pasan. Estará en observación y dependerá de cómo vaya respondiendo con el paso de las horas.
Hay una realidad a la que Facundo Farías comienza a adaptarse: su estilo de juego lo lleva a estar propenso a recibir golpes de los rivales. Es encarador, atrevido y esa guapeza para buscar siempre el mano a mano con el rival, lo convierte en un "blanco" directo. Al no poder frenarlo, el adversario apela a la infracción. Y como a veces lo marcan de a dos o de a tres, con más razón todavía se presenta la posibilidad cierta de una falta.
D.R.
"No le escapo a eso, me gusta encararlos y si me convierten falta, me levanto y me agrando", dice Farías. Eso es muy bueno. Distinto sería si se escondiera ante el menor signo de agresividad del rival. No se amilana Farías. No se acobarda. Es valiente. No se va a jugar a la otra punta ni tampoco desaparece del partido ante una pierna fuerte. Le cometen muchas faltas en los partidos.
No hay un reemplazante natural para Farías porque Colón no tiene un jugador con semejante capacidad de desequilibrio en el mano a mano. Si no llega al viernes, se podrá pensar en Wilson Morelo, en Leguizamón o en Beltrán. Son todos diferentes al pibe de la cláusula de los 10 "palos" verdes que se piensa incrementar. Está tan aceitado el funcionamiento de Colón del medio hacia arriba, que es un equipo que juega con "tres cuartos delantero", porque Farías -el más adelantado de todos- no tiene precisamente las características de los tres jugadores que, eventualmente, son candidatos a reemplazarlo.
Colón tiene tres atributos ofensivos: 1) la gran libertad que tienen todos (marcadores de punta incluidos), para llegar al área rival; 2) la amplia variedad, por ende, de jugadores que pueden llegar al gol (aún cuando estaba el Pulga, que fue el goleador de la Copa de la Liga, regía el mismo concepto), y 3) la peligrosidad de Facundo Farías.
Mencionarlo con nombre propio no le quita protagonismo al resto, no va en detrimento de lo que otros jugadores son capaces de aportar. Nombrarlo es mencionar al jugador capaz de convertirse en un problema serio para el rival. Y de ser el gran responsable de que un partido se incline a favor de Colón, como ya pasó, sin ir más lejos, en cancha de Vélez.
¿Está para la selección?, ¿figura en la carpeta de Scaloni?, ¿lo están observando con otros ojos?. No cabe ninguna duda que la exposición pública que viene teniendo a partir de lo que señala la prensa a nivel nacional, lo coloca en una situación de privilegio. Existe, como se sabe, el condicionamiento de ser un jugador del mercado local, con lo que hay que hacer el doble de mérito para ganarse un lugar. Quizás el puñado de partidos que ha tenido en Colón, todavía no sean suficientes para que entre en la consideración del técnico. Pero es la figurita que tiene el campeón del fútbol argentino, lamentablemente sin la chance de tener, al menos, la posibilidad de disfrutar de la formación de una selección local, como ya pasó en otros procesos.
Farías es el jugador del fútbol argentino con mayor cantidad de gambetas exitosas, duelos ganados y faltas recibidas. Este pibe, que el 28 de agosto cumplirá 19 años y que llegó al club del mano de Darío Duarte cuando ambos se fueron de Corinthians, hace ya muchos años y durante la anterior gestión de Rubén Rossi al frente de las divisiones inferiores, hace historia "a puro golpe".
Dialoguito con el Pulga
Facundo Farías admitió en el programa Paso a Paso por TyC Sports, que durante la semana previa al partido con Gimnasia estuvo en contacto con el Pulga Rodríguez, quien finalmente no viajó a Santa Fe para formar parte del equipo platense que cayó derrotado por 1 a 0.
"Estuvimos hablando en la semana y me mandó la camiseta. Siempre me trató bien, el otro día me mandó un mensaje y me preguntó '¿cómo estás, hijo?', siempre tratándome así. Le dije que me mande una camiseta, le dejé la mía y me dio la de él", declaró, y más tarde le dejó un saludo. "Luis, te mando un saludito. Te esperamos, espero vernos pronto, pero hoy los tres puntitos se quedaron acá en casa", concluyó la joyita sabalera.
A propósito del Pulga, ya recuperado de la dolencia que le imposibilitó viajar a Santa Fe, se entrenó para los titulares pensando en el compromiso de este miércoles, por Copa Argentina, ante Argentinos Juniors.
Morelo y Goltz con chances
Si bien habrá que esperar, existen muchas posibilidades que tanto Wilson Morelo como Paolo Goltz se sumen al plantel que viajará a Mar del Plata.
En el caso de Morelo, se lesionó en el isquiotibial en el partido con Godoy Cruz y se quedó afuera de los partidos con Vélez y Gimnasia. Mientras tanto, lo de Paolo Goltz fue más complejo, pues su último partido lo jugó hace casi cuatro meses: el 25 de abril, durante la disputa de la Copa de la Liga Profesional.
El defensor también padeció Covid y estuvo muy afectado por la enfermedad, razón por la cuál no se pudo entrenar con normalidad durante algunas semanas.
El que está descartado para jugar es Santiago Pierotti, quien fue expulsado con roja directa en el encuentro ante Gimnasia. Por otra parte, esperando además la evolución del traumatismo en el tórax de Farías, habrá que ver si el técnico mantiene en la titularidad a Nahuel Gallardo o si aparece Eric Meza en el costado izquierdo, quien resultó clave para la victoria ante el Lobo, el viernes pasado en el Centenario.