—¿Qué fue lo más raro que escuchaste de Fuertes en Colón?
Dice que “casi siempre dejé el 15 por ciento” cuando lo vendieron y que esa plata iba —supuestamente— para inferiores. Afirma que de los chicos que salieron del club “ninguno volvió a Colón en diez años”.
—¿Qué fue lo más raro que escuchaste de Fuertes en Colón?
—Que yo hacía negocios con Colón, que representaba a los jugadores, que ponía a los tecnicos, todas pelotudeces....
—¿Son los mismos que hablaron de ese famoso partido con Vélez? Que bajaste y pediste los premios en el vestuario y como no arreglaron perdieron el segundo tiempo...
—Sí, la escuché. Los premios se arreglan antes que empiece un campeonato, no entre medio de un partido. Me he dado cuenta que la gente...
—Pero recibís cariño a cada rato...
—Sí, me pasó en Paraguay en la Final, lo que viví fue impresionante como si yo iba a salir ese día a jugar en la cancha. Estuve, desde que bajé del micro de ESPN, media hora para hacer 100 metros. ¡La gente no me dejaba pasar!. He escuchado de todo. Pero también me di cuenta que en el fútbol la gente tiene poca memoria. Si este plantel hubiera salido campeón tenía un monumento en la puerta de la cancha. Hoy son todos unos ladrones, mercenarios y ahora sólo les importa la plata. Se sabe que al fútbol se juega como cualquier trabajo, por la camiseta a defender a muerte pero también reclamar lo que es tuyo...Ahora son todos mercenarios.
—Hablemos de “La Olla” y ese día. Me decía el Zurdo Vedirame que Colón nunca estuvo “en partido” en esa Final
—Coincido, te iba a decir eso.
—Y Chilavert me dijo que no se debía jugar
—Es que no se podía jugar, el viento, la lluvia, la pelota no corría. Fijáte que en el primer gol que nos hacen, la pelota pica y sale rapidísimo. Antes de ese tiro libre, 5 minutos antes, hubiera hecho todo lo posible por pararlo. Eran decisiones de los que estaban ahí adentro. Pero el árbitro no quería, tenía orden de jugarlo sí o sí. Uno nunca sabe, vos podés decir que se suspenda pero cuando la orden está de arriba es muy difícil que te lo paren.
—Burián y la “Pulga”, por ejemplo, me dijeron que no volvieron a ver la Final
—Yo tampoco la volví a ver. Lo que vuelvo a ver es lo de la gente, ese espectáculo único. Al partido no lo quise volver a ver...
—¿Por qué agarras el equipo como DT?
—Porque me lo piden. Yo siempre dije que no iba a dirigir Colon y que iba a volver en el momento que necesitara una mano. Me llamaron y me pidieron por favor que le de una mano y que iba a dirigir esos partidos. Por eso di una mano, no me arrepiento para nada, porque no hace falta que explique el sentimiento que le tengo al club y a la camiseta. Siempre quiero lo mejor. Traté de dar lo mejor sabiendo que el equipo venía en caída...uno siempre agarra con la ilusión de poder mejorarlo, de revertir con un cambio de aire. De tres partidos oficiales, empaté dos y perdí uno solo; no es que me fue tan mal tampoco. Perdimos el último con el mejor Defensa, con todas las luces y jugaba de memoria.
—Dirigiste con Defensa ese último partido ¿qué pasó después?
—Nunca más hablé con los dirigentes de Colón. Nunca más y según los comentarios que me llegaron a mí se habían enojado por mis declaraciones después del partido. Yo dije lo que sentía: que era un equipo que necesitaba un gran recambio, que había jugadores que habían cumplido un ciclo. Y creo no haberme equivocado.
—O sea que tu chat con Vignatti está “vacío” desde ese día
—El chat con Vignatti está mudo...en realidad no habló con ninguno. Me los he cruzado, los he saludado, pero charlas ninguna
—¿Y esa promesa que te iban a poner de manager?
—Yo nunca lo dije. Le hicieron una nota, en San Pablo, que yo iba a ser el nuevo manager. Yo nunca fui a decirle “José quiero una función en el club, nada que ver”...Salió de él solo. A ese partido viajé, porque lo armamos con amigos de Colón y con Jerónimo, mi hijo, que es mucho más fanático que cualquiera de esos que van a putear...“Papá quiero ir a ver a Colón al Morumbí y le dije vamos”. Y fuimos como hinchas: ahí me enteré lo que había dicho Vignatti, que yo iba a ser el manager y después nunca más me dijeron nada.
—Tantas tardes y noches gloriosas tuyas con Vignatti. Increíble que el trato esté frío...
—Habría que preguntarles a ellos, yo estoy tranquilo. Me sorprende por la relación que teníamos, a lo mejor no coincidimos mucho también porque pensamos diferente por la edad. Ellos son todos ya mayores de 70 años y no todos piensan igual. Yo no pienso igual que ellos.
—¿Pensás que por eso contrataron a Comesaña con 70 años y después a Ferraro?
—A alguien de ese grupo lo escuche decir “¡Viste lo que hizo con el Junior!. Con ese equipo, a nosotros también nos va a llevar ahí y vamos a ganar un campeonato”. Al quinto partido lo querían echar a patadas. Yo les dije que se iban a equivocar...¡No podés traer un técnico de 70 años a un fútbol como el argentino cuando no conocía a ningún jugador!. Otra cosa es Colombia. Lo único que hizo fue traer jugadores colombianos. Yo tuve jugadores colombianos, si nos sos fuerte de la cabeza no rendís...Wilson (por Morelo) porque no parece colombiano, te mata a codazos, va te choca, es guapo, Me gusta, no me gusta que juegue solo. Me gusta que juegue con un acompañante, con Viatri. Me encanta Morelo. Y Celis también me gustaba...me parece un jugador interesante.
—¿Qué pasa si al “Bichi” le pica el “bichito” de ser presidente de Colón? Como Milito, como Verón...
—Hoy me veo muy lejos, por todo lo que ha pasado. Es como que te van sacando las ganas.
—Lo que pasa es que si los dirigentes tampoco tienen memoria se complica...
—Muchas veces dicen el sentido de pertenencia y me pongo a pensar. ¿Cuántas categorías tiene Colón en fútbol?... ¿Diez?...¿Cuántos ex jugadores hay?...¿Cuántos chicos se fueron vendidos en los últimos diez años y hablan del sentido de pertenencia?...¿Por qué no quieren volver esos chicos?: Bertoglio, Mugni, Curuchet, Luque, Graciani, Meli...¿por qué ninguno volvió en diez años?...¿Cuál es el problema que ninguno quiere volver? No le dan importancia a las inferiores...porque no le dan importancia. Todo el mundo dice lo mismo. No tienen contención, me parece también que el coordinador y director de las inferiores tiene que ser alguien que sepa y se dedique; no poner a uno cualquiera y no darle la importancia que se merecen las inferiores. Todo el mundo dice lo mismo: “A las inferiores de Colón no le dan ni bola”. La última vez que nosotros comimos en la concentración la misma gente que cocina, que está el comedor debajo de las inferiores, se llovían los techos y no ha cambiado nada. Si no les das importancia a éso, el club es como que se va derrumbando de a poquito. Es una lástima, con lo que tiene Colón hoy en estructura: un estadio que no lo tiene cualquiera, un predio que no tiene cualquiera...
—Lo de las inferiores debiera “entusiasmar” y contagiar con las cifras de Conti y Alario
—Hay que dedicarle tiempo y prestarle mucha atención a las inferiores. En definitiva son los que te van a seguir generando recursos cuando vendés a los jugadores. Pero bueno, está muy mal diseñado. Si le preguntás al “Polaco” Bastía, supuestamente lo hicieron retirar para que sea el director deportivo. Pero deben haber borrado el teléfono, como dijo el Polaco y no lo llamaron más.
—Tuviste varias ventas en Colón...Derby de Inglaterra...Lens de Francia...¿Muchas veces dejaste el famoso 15 por ciento?
—Sí, si no no te vendían. Lo dejabas para las inferiores supuestamente, pero después qué sabés adonde va esa plata.
—¿Lo mismo con “dejar la deuda” también?
—La deuda también. Vos querés irte para progresar y muchas veces te dicen eso. Que la deuda es para las inferiores. Es más, pasó hace poco en Colón.
—Alguna anécdota imperdible...
—Me contaron una de un técnico que después fue presidente de ese club dijo en la charla técnico: “Muchachos, juega Fuertes hoy. No nos puede hacer un gol...”. El jugador de Huracán que me lo contó es porque teníamos el mismo representante. “Boludo, nos hiciste dos goles y nos dieron un baile”, me dijo. Le ganamos 3 a 1 a Huracán acá y me lo contó el Rolfi.
—El “Coco” Basile me dijo un día “Si Bichi la hubiera metido, ese equipo de Colón...”
—Al “Coco” le fallé, me expulsaron y me perdí esos partidos sin jugar. Me hubiera encantado jugar en ese Colón: Giovanny, Totono, el Pipa, el Chipi que la rompía toda. La defensa que teníamos. Nunca un partido disfruté tanto como contra Velez, con el Coco, yo estaba expulsado y todo el mundo hablando de ese Colón.
—¿Alguna vez te ofrecieron plata para “ir para atrás”?
—No me llamaron directamente a mí, pero si a través de una persona. “Poné un número”, nos habían dicho. No había ninguna posibilidad. Colón era juez de algo muy importante contra un rival muy importante. Yo no podía jugar ese partido y lo jugué.
—¿Probaste drogas “Bichi”?
—Noooo, jamás. No me interesa. Cuando arranqué en esa época y los controles antidoping eran sólo para la Primera, ibas a sorteo. Sabía que algún compañero estaba en ésa pero nunca me ofrecieron ni me interesó. Para mi la droga no me genera nada...No se si es buena o mala...si te pone triste o alegre. No necesito drogas.
—Ahora, afortunadamente, todo cambió y evolucionamos. ¿Qué pasaba si hace 20 años un jugador te decía que estaba enamorado de otro jugador?
—No me ha pasado pero se ha hablado mucho. Yo respeto todo ese tipo de situaciones. Lo de cada uno...Si vos venís y me decís “Loco, estoy enamorado de un vago...pero adentro de la cancha sos un animal...¿cuál es el problema?”. Cada uno puede hacer de su vida lo que quiera, siempre y cuando respete las normas de un vestuario y las condiciones que te pone el club. Creo que no está escrito en ningún lado que no se pueda.
—Si hubieras estado en el vestuario donde Tuzio dice que Ameli está saliendo con su esposa. ¿Cómo reaccionás?
—¡Qué problema...! ¿No?. No sabría que hacer en ese momento...no sabría que hacer
—¿Con el “Coco” Ameli perdiste relación?
—Sí, pero de vez en cuando hablamos. Lo que pasa que Coco un día después de todo ese problema, me dijo: “¿Sabés qué? Yo fui un pelotudo, porque no solo perdí un amigo, sino perdí a mi familia, a mis hijos, el cariño y el respeto de la gente”. Coco era muy respetado, lo tuve de compañero en River y fuimos campeones. Era una de la voces más escuchadas del plantel, por su temperamento. Por ahí, muchas veces uno no puede controlar esas locuras que te agarran por momentos y lo llevó a cometer el error que cometió.
—¿Te calentaste cuando el “Chino”Garcé dijo que vos sabías lo de la Virgen?
—Vino y me dijo “hablamos con los chicos”. Yo le dije “Chino yo no estoy de acuerdo con eso y ya lo hablamos un millón de veces”. En su momento, cuando lo habló conmigo, le dije no comparto ese tipo de cosas. No las comparto y no me voy a meter en un problema. Después, al otro día, nos enteramos que la habían sacado. El sabia lo que yo pensaba.
—Mucha gente, en especial la que no te quiere, dice: “El Bichi Fuertes quemó la plata...está fundido”...
—No soy Diego, para comer caviar y champagne, pero no estoy fundido...He escuchado cada cosa, mirá si me voy a hacer problema a esta altura de mi vida.
—A esta altura del partido...¿qué dice Jesi, tu esposa?
—Ya estamos curados de espanto. De todas las cosas que se han dicho y que se dicen. No nos mueve un pelo.
—En una ciudad tan futbolera, hasta el hincha de Unión te respeta...
—Siempre lo digo...Acá me siento a gusto, cómodo, tranquilo porque el hincha de Unión siempre me respetó. Jamás en mi vida tuve un problema...jamás. Mirá que nos cruzábamos cuando jugaba, antes de esos clásicos y no pasaba de la típica puteada adentro de una cancha. Me dan un abrazo y me saco fotos con hinchas de Unión.
—Almorzaste en la mesa de Mirtha Legrand, fuiste al “Bailando” con Tinelli, te subiste a coches de carrera...¿cantarías con Los Palmeras?
—Sí, me encantaría, aunque debo ser un desastre, pero me encantaría. Te agregó que además comí en la Quinta Presidencial también. No me privé de nada y siempre digo que el fútbol ha sido muy generoso conmigo. Si veo de donde salí y de dónde vengo, de una familia laburante. Por como fueron mis viejos a mí todo me costó el doble. Soy un agradecido a la vida y al fútbol por todo lo que me dio.
—¿Con qué te querés quedar a ocho años del “Ultimo Baile” con la camiseta de Colón en Santa Fe?
—Me voy a quedar con lo más lindo que viví acá que son los momentos en una cancha con la camiseta de Colón...A éso no me lo puede sacar nadie ni me lo puede borrar nadie de mi cabeza.