Como todo Unión, lo lleva a Diego Barisone en su piel…
Un 28 de julio de 2015, el jugador-hincha de Unión perdía la vida en un accidente automovilístico. Osvaldo Leiva, tatengue de Nelson, uno de los tantos que lo quiere recordar para siempre.
Una de las tantas banderas de Unión dedicadas a Diego Barisone. Crédito: Manuel Fabatía / Archivo El Litoral
“La mañana del 28 de julio de 2015 no será una más para la historia de Santa Fe. Es que minutos después de las 5, en un choque en la autopista a Rosario, falleció el futbolista Diego Barisone. El jugador nacido en la cantera del Club Atlético Unión, institución de la cual fue hincha, impactó con su automóvil con la parte trasera de un camión y perdió la vida de manera trágica en el lugar”, marcaba la crónica de El Litoral del 28 de julio de 2015, cuya cobertura fue replicada por medios de todo el mundo.
Pasaron 9 años ya sin Diego Barisone, algo que siempre estará presente en la vida del Mundo Unión.
Anécdotas, historias, despedidas, homenajes, tributos, banderas en la cancha, canciones, tatuajes. Siempre alguien, de tal o cual manera, recuerda al Diego del Tate. A Diego Barisone.
En este caso, El Litoral eligió a Osvaldo José Leiva, un tatengue de Nelson que decidió inmortalizar a Diego Barisone en su propia piel. “No se pierde ningún partido del Tate, Unión es parte de su vida, ya es tradición de familia junto a sus hijos Ana Florencia y Lucas Lisandro”, explican.
El tatuaje de Barisone que Osvaldo José Leiva lleva en su piel.
Osvaldo, que aprovechó el sol de este domingo para ir a pescar y después prepararse para alentar por tele al Tate de su vida, fue por más. No sólo tiene un tatuaje de Diego Barisone, hace poco sumó otro y ya tiene dos del querido Dieguito rojiblanco en su propia piel.
“Papi no era allegado ni conocido de Diego ni de la familia, ni nada por el estilo. Es pasión pura, sentimiento, admiración de hincha lo de mi viejo. Eligió esa figura por lo que implicó ese momento y esa foto tan especial que todos recuerdan en Unión”, cuenta Lisandro.
La “procesión” desde Nelson hasta el 15 de Abril se cumple desde hace muchos años: “A veces se me complica a mí por el laburo, pero mi papá y mi hermana van siempre a la cancha a alentar a Unión”. Es una tradición familiar desde la cuna: “Me hizo socio el día que nací, para que tengan una idea de lo que es Unión en mi familia”.
No sólo tiene un tatuaje de Diego Barisone, hace poco sumó otro y ya tiene dos del querido Dieguito rojiblanco en su propia piel.
El tributo de Osvaldo Leiva me hace acordar mucho a una reflexión de hace algunos meses en Asunción del Paraguay: hay dos formas de morir en la vida, como dice el querido uruguayo Gerardo Pelusso. “Se muere cuando te entierran y uno vuelve a morir cuando lo olvidan”, me decía hace un tiempo en Conmebol, cafecito de por medio. Es por eso que Diego Barisone vivirá siempre en Unión. Ya es eterno, como en la piel del tatengue Osvaldo Leiva de Nelson. Y está más vivo que nunca porque nunca nadie lo va a olvidar en tierras rojiblancas.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.