Siempre Pepe Castro tiene cosas para decir. Y si algo no se le puede reprochar, en absoluto, es que formó parte de un proceso de dos años que fueron tan exitoso como recordado por el hincha, como aquél ascenso en 1989 y la posterior campaña en Primera. Fue tan emblemático lo de José Antonio Castro, que cuando parecía que su llegada a Unión, tres años después de haber sido campeón de América y subcampeón del mundo con Argentinos Juniors, era un declive en su carrera, terminó transformándose en un nuevo envión porque se fue a jugar a San Lorenzo después de haber sido goleador del equipo, tanto en la B como en la A, en un torneo en el que Unión llegó a pelear en los primeros lugares en la temporada 89-90.
Pepe Castro hizo declaraciones en el programa radial (96.7) de Ricardo Porta y fue crítico con Azconzábal. Dijo que "hay mucha gente que se 'sube al colectivo' ahora y yo lo dije, sin tener nada personal con el actual técnico de Unión, que lo peor que le podía pasar a Unión es que vaya, al club, gente de una doctrina que no le iba a dar nada a la institución. Lamentablemente, no me equivoqué cuando lo dije en su momento, al conocerse su contratación".
Ampliando ese concepto, dijo que "El llega de la mano de la misma doctrina del manager en su momento e igualó para abajo. Traer a alguien de muy poca jerarquía, que no ganó nada, te hace igualar para abajo. Por ejemplo, Defensa y Justicia lo llevó a Crespo. Y así le fue: campeón de la Sudamericana. No es lo mismo que un jugador mire al banco y vea a Crespo que haga lo mismo y lo vea a Azconzábal. Esta clase de técnicos va a subordinar siempre a los jugadores a la táctica", señaló el ex jugador de Unión.
Tenés que leerEl extravío de afuera que se transmite a los de adentroRecordó lo ocurrido en el último partido del torneo pasado. "El día que empata con Colón, quería 'romper' todo en mi casa porque el que hizo el gol (García), va a festejarlo al córner en lugar de agarrar la pelota de adentro del arco y sacar rápido porque había que ganar el partido... No es el hecho de poner siete pibes de las juveniles, sino la impronta que se le dé a esos chicos. Los pibes solos no se sostienen y si entran en el medio de la confusión, les va a pasar lo que le pasó con River, porque no saben cuándo defender y cuándo atacar".
En varios pasajes de la charla se refirió a un aspecto puntual producto de esta pandemia. "Hoy, jugar es un trámite porque no tenés el hostigamiento de la gente, porque la gente no va a la cancha. Si no fuese así, estaría muy complicado... Esta manera de jugar, pensando tanto en el rival y en la táctica, es la que trajo Zuccarelli en su momento y se la hicimos cambiar, cuando ascendimos en el '89. La única vez que no le eché la culpa a Azconzábal, fue en la goleada con Vélez, porque ese día los jugadores se pusieron primero los botines y después las medias. ¿Por qué?, porque erraron goles increíbles... Pero después no le pudo ganar a Independiente, que en ese momento era un equipo que perdía solo los partidos".
Cuando se le consultó cuál debe ser la receta, no dudó: "Ser protagonista, porque así, siendo protagonista, me va a doler menos la derrota... Acevedo habló de pelear cosas importantes y se fue a Godoy Cruz... ¡A Godoy Cruz!... Acá hay que generar contagio, hay que tener un mensaje claro y el técnico no se lo transmite a los jugadores. Son técnicos que están obsesionados por su táctica y por esperar a ver qué hace su rival. Colón salió campeón porque hacía un gol e iba a buscar el segundo y el tercero. Así hay que jugar, pero en Unión se empareja para abajo, vuelvo a repetir".
También tuvo un mensaje hacia el hincha. "El hincha de Unión tiene que dejar de ser cómplice de la mediocridad. Tiene que exigir que se busquen técnicos y jugadores de jerarquía... Si Unión tuviese jugadores de jerarquía, seguramente le dirían: 'Flaco, ¿qué estamos haciendo?". Y amplió el concepto: "A Brítez lo echaron un montón de veces en Unión y Azconzábal echó la culpa de la derrota a la expulsión... ¡Imagináte la platea techada de Unión si hubiese gente en las canchas!... Hoy se juega sin presión, no pasa nada... Unión es uno de los pocos equipos que juega a esperar qué hace el rival, entonces tiene lo que se merece".
También dejó una noticia: "Voy a ir a Santa Fe a dar unas charlas para que el quiere oír, que oiga. Va a ser una linda oportunidad para mí, que no busco nada, sólo la de responder a una invitación de gente de distintas agrupaciones, para que la gente me escuche. Hay que hacerlo grande a Unión, hay que despabilarse, que la cancha reviente, que el hincha sienta orgullo. Así, como está ahora, no se va a lograr".
También habló del presidente. "¿Spahn?, si no tengo conocimiento y fundamentos, no puedo hablar, no sé cómo lo maneja al club porque cuando fuimos a Santa Fe no tuvimos mucho diálogo con él, lo único que puedo decir es que a mí no me cierran estas cosas como la de trabajar con un representante que trae y lleva jugadores. Cuando a la gente le das cosas y le mostrás que querés ser grande de verdad, alienta y apoya. Yo fui campeón de América en un equipo chico como Argentinos Juniors, puedo hablar con propiedad. Cuando llegué al club, se llovía en el vestuario y luego se convirtió en una institución de la hostia... ¿Puede haber crecido tanto Defensa y Justicia y no Unión?, no lo puedo creer".
Para finalizar, dijo que "si nosotros no cambiábamos en el '89, no ascendíamos. Si las patas van una para un lado y otra para el otro, no va. Así tenga que agarrar un megáfono e ir a la peatonal San Martín a hablar, lo voy a hacer. El socio de Unión no tiene que ser cómplice, tiene que saber elegir y no equivocarse", concluyó.
"¡Imaginate la platea techada de Unión si hubiese gente en las canchas!... Hoy se juega sin presión, no pasa nada".