"El defensor central Oscar Piris es nueva incorporación Tatengue. Tiene 33 años y su último club fue Gimnasia y Esgrima de La Plata. Luego de realizar la revisión médica firmó contrato por 1 año", fue lo que comunicó formalmente Unión en sus cuentas oficiales de redes. De esa manera, el primer movimiento es peón por peón: se fue la experiencia de Diego Polenta y llega Piris, ex Gimnasia, con 33 de mano. Claro que, al mismo tiempo que se cerró el "2" y ya está en Santa Fe, se complicaron las opciones iniciales para fichar a un "9". En realidad, acorde al pedido de Gustavo Munúa, el DT del Tate necesita dos delanteros de centro-área. Tarragona, Churín, Sosa y Benítez estaban en el primer radar; ahora hay que barajar y dar de nuevo.
El primer pedido del entrenador, que pudo ir cambiando con el correr de los días bajo el calorcito de Casasol fue muy claro:
-1) Un arquero más si no sigue Santiago Mele
-2) Tres defensores (dos zagueros sí o sí)
- 3) Un volante central/número "5"
- 4) Dos delanteros de área; es decir dos "9"
- 5) Hablar con Junior Marabel y Jairo O'Neill para explicarles que arrancan "de atrás" la pelea
Cuando se abrió el mercado, además del nombre de Oscar Piris, apareció en radar el nombre del paraguayo Pablo Adorno, ex Huracán de Parque Patricios. Pero finalmente la moneda cayó para el lado del ex Gimnasia de La Plata, que ya firmó y entrena con el plantel tatengue en Casasol.
En cuanto al tema de los tres caños, los dirigentes piensan que (más allá de la dolorosa no continuidad de Santiago Mele) con la experiencia de Sebastián Moyano, junto a la madurez de Marcos Peano y la frescura del "Chaco" González, además del empuje de Meuli, el puesto está totalmente cubierto. Por ahora, no es prioridad sumar un golero.
En el fondo, de los tres defensores...llegó Oscar Piris y es posible que se pueda dar la continuidad de Facundo Agüero, por lo que restaría algún nombre más en el fondo. En el mediocampo, no trascendió ni el nombre ni el estilo de "5" que quiere el coach charrúa para el nuevo Unión.
Finalmente, como le pasa a todos los clubes de Argentina, lo más complicado es el número "9". En el caso de Unión, por duplicado, ya que Gustavo Munúa necesito algo más, recordando que Leo Ramos, Mariano Peralta Bauer y el moreno charrúa Jonatan Álvez fueron las bajas y los cortes de la temporada anterior.
Por lo tanto, la búsqueda acorde a los números del presupuesto del Tate no será algo fácil. El primer nombre fuerte, ruidoso y con pertenencia era el de Cristian Tarragona, santafesino y fanático tatengue, cuyo contrato se venció el 31 de diciembre. Manejado por Uriel Pérez, los dirigentes rojiblancos avanzaron con una oferta. Sin embargo, a pesar de la crisis de Gimnasia, el "Lobo" (ya sin "Pipo" Gorosito y ahora con "Chirola" Romero de la casa), el esfuerzo será "todo por Tarragona".
Juan Pablo Arrien, vice de Gimnasia, admitió ante la consulta de El Litoral que "estamos muy cerca del sí de Cristian Tarragona; sólo restan pequeños detalles". Antes de la lesión ligamentaria, el santafesino clavó 11 gritos en 18 partidos. Descartado, entonces, para llegar a López y Planes.
Otro de los nombres, ya explicado por El Litoral, fue de un elemento santafesino y también hincha del Tate: Gonzalo Sosa. Claro que, cuando Unión lo buscó, pasó directamente de Mazatlán (México) a Chile, donde lo buscó el Audax Italiano. En la misma búsqueda apareció Diego Churín, ex Independiente de Avellaneda y Cerro Porteño de Paraguay, hoy en el Goianense de Brasil. Si bien interesa, están lejos con los números.
Finalmente, el ofrecimiento por Facundo Castelli, goleador del ascenso con la camiseta de Estudiantes de Caseros, pero pretendido por tres o cuatro clubes argentinos al mismo tiempo. Si bien se dieron las primeras charlas, tampoco está avanzado y mucho menos cerrado.
Sin dudas, por lo visto hasta acá de este mercado de verano argento, las mayores complicaciones están en esos "dos 9" que pidió Gustavo Munúa y que no aparecen por ningún lado.