Kily González: "Unión hizo un partido desastroso, lamentable e inexplicable"
El entrenador de Unión, Cristian González, no ahorró nada en su autocrítica, fue con el “cuchillo al hueso” ni tampoco puso excusas porque no ha podido sumar refuerzos.
Kily González: "Unión hizo un partido desastroso, lamentable e inexplicable"
Se lo notaba molesto, resignado ante la evidencia pero no por eso frontal y autocrítico. A este periodista le llamó la atención ese “baño de humildad” que el Kily pidió. ¿Acaso no es humilde su equipo?, ¡claro que lo es! Si algo no le falta a este plantel de Unión es saber y entender que el sacrificio, la intensidad, la entrega y el dar todo adentro de la cancha no se puede negociar de ninguna manera. ¿Fue un mensaje más para los de afuera que hacia los de adentro?, “yo hablo de mi plantel…”, fue la respuesta del Kily ante la pregunta de El Litoral.
“Fue un partido desastroso, inexplicable, no tengo palabras para analizar esto que vimos. No salió absolutamente nada de lo que sabemos hacer y no le encuentro justificativos… De vez en cuándo viene bien que nos pongan una piña en la boca, que tengamos un baño de humildad”, arrancó un entrenador consternado, que dio la cara como la da siempre y que reflejaba en su rostro, en el vocabulario, en sus expresiones y también en el timbre de su voz, la profunda desazón que sentía por este paso en falso muy difícil de entender.
Es que Unión había conseguido una cierta regularidad, algo clave para un equipo que pretende pelear arriba con las limitaciones y los problemas que debió acarrear este plantel, empezando por haber sido el último club en levantar la inhibición y en no haber podido, hasta ahora, sumar algún jugador que lo potencie.
En 11 partidos, Unión era el equipo con menos goles en contra luego de Huracán (que mantiene su productividad defensiva). Le habían convertido apenas cinco goles en esa cantidad de partidos, pero recibió en uno solo la misma cantidad. Es decir, en casi 1.000 minutos, Cardozo debió buscar la pelota cinco veces adentro de su arco; y en los 90 del sábado, la misma cantidad. Inentendible, extraño y una clara muestra de irregularidad que preocupa, salvo que el futuro demuestre que lo de este partido en Victoria fue un espejismo, una piedra que Unión consiguió sacarse rápidamente del zapato. Pero, de eso, el único que sabe es ese futuro que aún no llegó.
“Dejamos pasar una oportunidad muy buena y no tengo explicaciones para esto. No hicimos nada de lo que hablamos y de lo que entrenamos… ¡Nada!... Hay que darse cuenta que el fútbol es lo que hiciste y lo que no hiciste. Hoy no hicimos nada… O hicimos todo mal… Y en cada partido hay que estar a la altura de lo que te jugás… Y siento que nosotros no estuvimos”.
“Yo sé que esto nos va a servir… Les dije a los muchachos que fue desastroso lo que hicimos, que nunca padecimos como padecimos hoy y que esto debe ser un necesario aprendizaje… No quiero quitarle méritos al gran partido que hizo Tigre, pero me preocupa el desastroso partido que hizo mi equipo”.
“Sería fácil hacer hincapié en todo lo que venimos viviendo en el mercado de pases y no voy a caer en ese facilismo… El mismo equipo que jugó hoy, fue el que le ganó 3 a 0 a Argentinos Juniors… Nunca en mi vida puse excusas y no las pondré ahora porque hace unos días que recién levantamos la inhibición… Ya está… Lo único que digo es que hoy hicimos un partido lamentable, para el olvido, no rescato absolutamente nada e insisto en que esto nos tiene que servir”.
“El fútbol obliga a estar ciento por ciento siempre y nosotros fallamos en eso. No estuvimos a la altura de un equipo que podría haber quedado como único puntero del torneo. Al partido lo empezamos bien un ratito, pero después recibimos goles en momentos clave y nunca nos recuperamos”.
“Yo ví en el primer tiempo un desajuste total en el equipo. Estábamos lejos de todo. Lejos del juego, lejos de la presión sobre el rival. Entonces, puse a Tanda y a Del Blanco para tratar de solucionar eso que me preocupaba sobremanera. Pero apenas arrancamos el segundo nos metieron un gol y eso fue fatal”.
“De estas cosas se aprende, son golpes que nos deben hacer reaccionar”.
“Vamos a traer algún jugador seguramente, lo que pasa es que al estar inhibidos, los jugadores se fijaban en eso y dudaban. Y nosotros nos fijamos en jugadores que estaban afuera, como Fragapane, y el mercado no nos permite ahora que esto se pueda dar. Acá está todo al límite, hay que hilar muy fino y lo que hay, especula mucho con la parte económica. Necesitamos jugadores, siempre lo dije”.
“Esto nos ha demostrado que no somos el Real Madrid, pero ya hoy mismo en el entretiempo les dije a los jugadores lo que pensaba y seguiré haciéndolo en estos días porque el viernes tenemos que recuperarnos ante nuestra gente”.
“Yo nunca voy a renegar de lo que pienso y lo digo. Por eso, insisto en que lo de hoy fue desastroso, lamentable. Pero tengo también la obligación de que volvamos a ser lo que fuimos. Esto duele, pero insisto en que tiene que servir”.
“Esto es fútbol y no hay cosa más linda que pelear por un primer puesto. Por eso, descarto totalmente que el hecho de saber que podíamos alcanzar ese lugar nos perjudicó, todo lo contrario… No se olviden que estos chicos, en su gran mayoría, dieron la cara y pelearon en el peor momento del club para no descender… Fue un partido malo, muy malo, no salió nada bien, los rendimientos fueron malos y eso se contagió”.
“En el fútbol argentino, cualquiera le puede ganar a cualquiera. Esta derrota nos duele mucho y le pedimos disculpas a nuestra gente porque seguramente los hinchas se ilusionaron mucho y créanme que me duele haberles fallado… Hablaré con mis chicos, levantaremos la cabeza y tendremos que salir adelante”.
“Este es un plantel que sabe cuáles son sus virtudes y sus defectos, pero no trajimos ninguna virtud a esta cancha. El contagio negativo fue muy grande, el partido fue malísimo… ¿Qué nos queda?, morder la bronca y salir a ganar el viernes”.