Redacción El Litoral
Lo planteó Carolina Cudós, directora del área de Epidemiología del ministerio de Salud de la provincia.
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“El único tipo de prevención que se puede hacer es vacunarse”, aseveró Carolina Cudós, directora del área Epidemiología del Ministerio de Salud de la provincia. Es que los casos de sarampión detectados en un bebé de cinco meses y una beba de seis meses, ambos en Buenos Aires, pusieron en alerta a las autoridades sanitarias de todo el país y todavía están siendo analizados, por lo que no puede asegurarse que hayan sido autóctonos, es decir que se contagió en el país, sin haber viajado ni estado en contacto con un viajero.
Si bien en la provincia de Santa Fe no se registran casos desde hace mucho tiempo, el Ministerio de Salud no baja la guardia. Cudós indicó que en la provincia se realiza una vigilancia exhaustiva de las enfermedades febriles exantemáticas (con erupciones en la piel). “Si el médico sospecha la presencia de esta patología se realizan los estudios y además se hace el ‘control de foco’, con el cual se verifica que todos los contactos tengan las vacunas realmente colocadas”, explicó la médica.
Desde el ministerio aseguraron que hay vacunas en todos los efectores de la provincia para prevenir brotes del virus, y que no hay problema de abastecimiento. “Controlamos que los chicos tengan dada la dosis de vacuna triple viral del año y 5 años de edad”, destacó.
Virus de importación
Las autoridades del Ministerio de Salud de la Nación investigan si estos dos últimos casos están relacionados con la importación, esto sería si los menores (que no estaban vacunados ya que la primera dosis contra el sarampión se aplica al año de edad) estuvieron en contacto con alguien que viajó.
“Lo más probable es que los casos de Buenos Aires estén vinculados a la ‘importación’, pero nos avisaron que los están investigando”, informó Cudós. La directora de Epidemiología advirtió que las personas que van a viajar deben confirmar que están inmunizadas. “Todos los adultos —nacidos de 1965 en adelante— deben corroborar que tienen las dos dosis aplicadas. Si van a viajar y no tienen ningún registro deben vacunarse”, recordó.
Además, los padres deben estar atentos si tienen pensado viajar a una zona donde hay casos de sarampión con un niño menor de 1 año —hay brotes en Venezuela, Brasil, Colombia y Perú; también en el sudeste asiático y en toda Europa—. “A esos niños se les aplica una dosis, pero luego del año deben colocarse las dos vacunas correspondientes”, indicó Cudós. De no contar con las dos dosis recomendadas, la vacuna debe ser aplicada, al menos, 15 días antes del viaje.
En la Argentina, el último caso de sarampión endémico se registró en 2000. Desde entonces, hubo 32 casos importados. Los últimos tres ocurrieron en la ciudad de Buenos Aires: dos fueron importados y uno relacionado con una persona que había viajado al exterior.
Síntomas
Los primeros síntomas de la infección suelen ser: tos seca, secreción nasal, fiebre alta y ojos rojos. Es posible que la persona no presente síntomas hasta 8 o 10 días después. Los niños que tienen la enfermedad suelen desarrollar unas pequeñas manchas de color rojo, con un centro blanco o azulado, que aparecen en el interior de la boca. La erupción del sarampión comienza de 3 a 5 días después de iniciarse los primeros síntomas, y suele presentarse junto con fiebre de hasta 40°. La fiebre y la erupción desaparecen gradualmente después de varios días.
>>> Vacunas
—De 12 meses a 4 años: deben acreditar una dosis de vacuna triple viral (sarampión-rubéola-paperas)
—Mayores de 5 años: deben acreditar dos dosis de vacuna con doble o triple viral después del primer año de vida.
—Las personas nacidas antes de 1965 no necesitan vacunarse porque son considerados
inmunes.
—Las mujeres que están planificando un embarazo es clave que revisen si están vacunadas, ya que con sus anticuerpos van a proteger al bebé durante los primeros 6 meses de su vida.