Deciden suspender las acciones para abrir paso entre los embalsados de la Setúbal
Tras la reunión que se llevó a cabo entre distintos organismos y la determinación desde Defensa Civil de evitar que se continúe con estas tareas hasta que se evalúe la mejor forma de hacerlo, las entidades náuticas aguardarán los pasos a seguir.
Navegantes trabajaron sobre el embalsado con motoguadañas, machetes y grampines. Pero la tarea no arrojó los resultados deseados y el embalsado sigue taponando la desembocadura de la Setúbal. Crédito: Fernando Nicola
Los embalsados en la Laguna Setúbal siguen en el centro de la escena, tanto en el paisaje ribereño de la ciudad como en al preocupación de los clubes náuticos, que no pueden navegar aguas arriba por esta “pared” natural a la altura de los pilotes del ex puente ferroviario.
Por eso, la semana pasada un grupo de nautas a bordo de lanchas y yates intentaron abrir paso entre los canutillos. Trabajaron sobre el embalsado con motoguadañas, machetes y grampines. Pero la tarea no arrojó los resultados deseados y el embalsado sigue taponando la desembocadura de la Setúbal.
Sin embargo, esta acción conjunta determinó que se lleve a cabo una reunión entre distintos organismos para delinear las próximas acciones. La mesa de trabajo tuvo representantes de Protección Civil, de los ministerios de Ambiente y de Seguridad de la provincia, del Instituto Nacional del Agua, de la Prefectura Naval Argentina de Santa Fe, del Ejercito Nacional (Batallón de Ingenieros Anfibio 121), de la Municipalidad de Santa Fe, de las universidades y de las instituciones deportivas.
Tras la misma, el secretario de Protección Civil de la Provincia, Roberto Rioja, manifestó que “no hay que intentar retirarlo” al embalsado, “porque puede ser un riesgo y, además, porque en caso de hacerlo de manera no controlada puede causar algún inconveniente aguas abajo”.
Tras esta indicación, desde el grupo de nautas autoconvocados para tratar de retirar los embalsados emitieron el siguiente comunicado: “Visto las últimas reuniones que se dieran en la dirección de protección civil de la provincia y considerando que una gran parte del cometido se ha cumplido (movilizar a los organismos públicos para que tomen cartas en el asunto) hemos decidido MOMENTÁNEAMENTE desistir de seguir trabajando sobre el embalsado con el objeto de abrir un paso a la Laguna.
“Si bien no se han tomado acciones directa, entendemos que esto sucederá en los próximos días. Si habiendo transcurrido un plazo prudencial, y si observamos inacción por parte de los organismos públicos, volveremos a convocar a todos los que de una u otra manera han prestado colaboración para proseguir con la tarea de abrir el paso entre el pilar 2 y 3.
“Desde muchas gracias a todos los que se sumaron en esta cruzada contra el embalse de la Laguna Setúbal”.
Qué es un embalsado
"Es una gran cantidad de vegetación entrelazada", explicó días atrás Aylén Carrasco, docente e investigadora de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Hídricas de la Universidad Nacional del Litoral (FICH UNL). "Un muy denso colchón de plantas enredadas sobre la superficie del agua, de unos 25 o 30 centímetros por debajo de la superficie y unos 15 centímetro, arriba. Esos tallos y raíces entrelazados forman un tejido sobre el cual crecen las plantas que ya alcanzan a tener dos metros y medio de altura", describió.
Para dimensionar lo que es la maraña verde, Carrasco apuntó que los diferentes tipos de canutillos que la componen "tienen hasta 14 metros de largo", según pudieron verificar. Estos canutillos son los que conforman este tejido y lo solidifican. Así el embalsado es tan firme que no se disgrega al impactar contra los pilotes ferroviarios, en su viaje aguas abajo.
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