Cada vez falta menos para que el Nuevo Hospital Iturraspe funcione a pleno. Si todo transcurre normalmente, la “migración” definitiva al flamante efector se realizaría “sobre el final de la primera quincena del mes de septiembre”, así lo confirmó César Pauloni, coordinador del Tercer Nivel del Ministerio de Salud de Santa Fe.
“El proceso comenzó hace un año y medio, cuando comenzamos a reunirnos con todo el personal del hospital. Hace unos unos dos meses se generó un comité de migración que trabaja, justamente, para ultimar los detalles de la etapa que queda. Para garantizar la seguridad de los pacientes y el adecuado trabajo de los equipos de salud, se contempló como fecha de migración la finalización del período invernal de alta demanda respiratoria”, dijo Pauloni, quien también agregó que “teniendo en cuenta que está culminando la etapa y están bajando las consultas por guardias (que fueron muchas), siguen las internaciones en cuidados críticos, hay pacientes internados y todavía algo de circulación viral, pero estimamos que este descenso va a continuar lo que nos acercaría a la fecha prevista para levar adelante el traslado”.
Todavía no hay una fecha exacta para la migración. El Ministerio está en comunicación constante con la Municipalidad y la Policía, para acordar un día, que podría ser un sábado para que la ciudad no esté en su movimiento semanal.
“El denominado ‘día cero’, es cuando comienza a funcionar el flamante efector. La semana anterior seguramente habrá reprogramación de cirugías (no las oncológicas). Trabajaremos en coordinación, por cualquier cosa que necesitemos, con los otros hospitales y también con los sanatorios privados. El día cero debemos tener la menor cantidad de población hospitalaria”, aseguró el funcionario provincial.
Cuando se efectúe el traslado, el Hospital Iturraspe actual, tendrá trabajando a los turnos salientes hasta que quede el último paciente. Luego, queda sanitariamente cerrado.