El Río Paraná vuelve a mostrar por estas semanas su lado más “flaco”. En la ciudad de Santa Fe la bajante histórica se hace notar en la poca agua que presenta por estos días la Laguna Setúbal.
Desde el mediodía del martes 10 que registra esa altura en el puerto local. El INA continúa advirtiendo por un panorama “desfavorable”. Por su parte la Municipalidad pide no transitar sobre la Laguna Setúbal.
El Río Paraná vuelve a mostrar por estas semanas su lado más “flaco”. En la ciudad de Santa Fe la bajante histórica se hace notar en la poca agua que presenta por estos días la Laguna Setúbal.
Desde el martes 10 de noviembre, la altura del río se “clavó” en 60 cm, registro cercano al récord que marcó el 21 de mayo de este 2020 cuando tocó los 48 cm, lo más bajo de los últimos 50 años.
Como viene reflejando El Litoral desde marzo, momento en que comenzó este proceso de bajante, el poco caudal de agua modificó los paisajes de las costas y las localidades ribereñas. En lo que respecta a la capital provincial, la Setúbal se muestra con extensas orillas y en algunos sectores directamente se puede observar su lecho. Por ello, desde la Municipalidad recordaron que no se puede transitar con ningún tipo de vehículo ni a pie. Tampoco bañarse, porque está prohibido.
En su reporte semanal publicado los viernes, el Instituto Nacional del Agua (INA), difundió las proyecciones en relación a la altura del río para los próximos días. Para el 17 de este mes se estima un nivel de 58 cm, mientras que para el 24 de noviembre se prevé 61 cm.
En el mismo informe se reafirma que “la evolución de los caudales provenientes de las altas cuencas dependerá fuertemente de las lluvias sobre las áreas de respuesta hidrológica más rápida”. En ese sentido, remarcan que “La perspectiva de corto plazo sigue siendo desfavorable. No se esperan eventos que puedan aliviar sensiblemente la situación de escasez y bajante que predomina en la región”.
“La tendencia climática con horizonte al 31 de enero de 2021 sigue siendo desfavorable. No permite esperar una recuperación franca en los próximos tres meses”, agregan.
Por último, indican que “las conversaciones formales con los países vecinos se han mantenido, concentrando la atención en el caudal en el río Paraná y especialmente en los niveles frente a las tomas de agua urbanas”.