La ruta 1 ya tiene colectoras y ciclovías pero el tránsito es caótico y peligroso
La gran cantidad de tráfico, las imprudencias al volante y la falta de control del tránsito incrementan los accidentes en la Costa. No se respetan las velocidades máximas, ni los semáforos, ni la prioridad peatón. Y estacionan donde quieren.
Mauricio Garín Peligrosa. En la autovía conviven el transporte de cargas, viajeros, vecinos de la zona, ciclistas y peatones.
Comenzó la temporada de verano y se potenciaron los problemas en el tránsito sobre la nueva autovía 1. El mayor problema se presenta entre el kilómetro 0, en la intersección con la ruta nacional 168, hasta el kilómetro 6, en San José del Rincón. Es que con la remodelación ese tramo de la ruta 1 dejó de ser tal para transformarse casi en una avenida urbana, con semaforización, cruces peatonales, calles colectoras, ciclovías y veredas. Pero al mismo tiempo sigue siendo la única vía de comunicación de la Costa por donde pasa el tránsito pesado. El problema se resume en una simple ecuación: muchos conductores no respetan nada. Y así ocurren los accidentes, que en algunos casos terminan en tragedias.
La explosión demográfica que tuvo la Costa en las últimas décadas demandó obras de infraestructura urbana para brindar mayores servicios a los vecinos de los barrios que forman parte de tres localidades: las ciudades de Santa Fe y Rincón, y la comuna de Arroyo Leyes. Y entre esas obras de infraestructura, el gobierno provincial llevó adelante un viejo anhelo de los costeños: las mejoras en la ruta 1.
Por entonces hubo dos alternativas. Una era construir una circunvalación para el tránsito pesado, más veloz, con accesos a los distintos barrios de la costa. La otra es lo que se terminó haciendo: una autovía sobre la vieja traza de ruta.
Así fue como se encaró el proyecto de transformación de la vieja ruta en una autovía con dos carriles por sentido, más otros dos carriles por cada colectora, una ciclovía de cada lado y -donde quedó espacio- veredas peatonales. Ahora se están terminando de construir las calles colectoras y las ciclovías. Luego falta colocar toda la señalética y demarcación, para dejarla inaugurada. Aunque los usuarios ya transitan los diferentes carriles que fueron habilitados.
Crecimiento
Con ese progreso llegó también una gran inversión del sector privado que invadió la zona de nuevos comercios, a ambos lados de la autovía. Una verdadera avenida comercial. Esto trajo aparejado un mayor movimiento de vehículos que antes pasaban de largo y ahora estacionan para hacer las compras o para descargar mercaderías. Además, el siempre creciente número de vecinos de Santa Fe que se muda a vivir a la Costa o construyen sus casas de fin de semana, incrementó el tránsito en la zona. Y a todo esto se le suman los transportes de carga que viajan desde y hacia las localidades del norte provincial.
Así las cosas, hoy la autovía 1 es un caos. ¿Por qué? Porque muchos conductores no respetan las indicaciones de tránsito y porque en horarios pico la carretera desborda de gente impaciente por llegar a destino. Un embudo. Esto se torna aun más caótico los domingos al atardecer, cuando exactamente a la misma hora todos quieren regresar desde las quintas a sus hogares. Si pudieran se pasarían por encima para llegar primeros. Si pudieran hacer volar sus autos lo harían.
Peligrosa
"El tránsito sobre la ruta 1 es verdaderamente un caos, un caos", afirma Beatriz Antille, desde la vecinal Villa California. "Nuestro trabajo es remar y remar contracorriente para que alguien nos escuche y le preste atención al problema".
"Básicamente es un caos", repite Ignacio Maciel, un vecino de la Costa que integra el grupo Ciclovía en la Ruta 1 de Santa Fe. "Es una locura", describe cuando se lo consulta sobre los inconvenientes en el tránsito en la autovía 1. "El otro día venía en bici a mi casa y dobló un auto en contramano, me tiró el auto encima y no conforme con eso paró y me puteó", ejemplifica. "La obra está, el problema es la gente", opina.
"Yo vivo en Arroyo Leyes. Ahora pusieron radares desde el acceso de Rincón hacia el norte y no se puede circular a más de 60 km/h. El verdadero problema es de ahí hacia el sur, sobre la ruta nueva, es un desmadre, la gente hace cualquiera", se queja Mariano Rosas, un vecino de la costa.
-¿En qué mejoró el tránsito con la construcción de la autovía?
-Se hizo más fluido. Pero el problema son las imprudencias de la gente que pasa los semáforos en rojo, los cruces y giros en U son un peligro. Son muy pocos los que respetan. A veces estás parada en un semáforo y pasan como locos sin respetarte -dice Antille-. No hay controles.
-¿Se ven inspectores que ordenen el tránsito?
-No. Vamos a iniciar una gestión para solicitarle a ambas municipalidades (Santa Fe y Rincón) y a la Agencia Provincial de Seguridad Vial que se incrementen los controles de tránsito y las inspecciones a los locales comerciales que avanzan sobre las ciclovías, porque sino nos terminamos peleando entre vecinos -responde Maciel.
Las inconductas al volante son varias. "Otro inconveniente es que muchos automovilistas circulan a gran velocidad por las colectoras", apunta Maciel. Y no respetan los semáforos", cuenta. Luego recuerda lo que le ocurrió a un amigo suyo, a quien en esa situación lo atropelló un camión y sufrió serias lesiones. "Yo sigo yendo a diario en bici a Santa Fe, pero te digo la verdad: cada vez que vas no sabés si volvés".
Mauricio Garín ¿Qué es? ¿Es una ruta? ¿Es una autovía? ¿Es una avenida? ¿Es todo ello a la vez?
¿Qué es? ¿Es una ruta? ¿Es una autovía? ¿Es una avenida? ¿Es todo ello a la vez?Foto: Mauricio Garín
Colectoras
Otro problema ocurre cuando los vehículos estacionan sobre las colectoras en la zona donde hay semáforos. "Entre el que estaciona ahí para ir a un negocio y el auto que está esperando el giro en U en el otro carril se bloquea la circulación y se llena de autos a los bocinazos", describe la vecinalista de Villa California. "Y cruzar la ruta caminando es de vida o muerte, y si se trata de una persona adulta que camina con dificultad es imposible".
-¿Cómo creen los costeños que se puede ordenar el tránsito?
-Hay que hacer respetar cada sector. Y es una tarea que deberían realizar los inspectores. Pero acá no se ven. No hay ningún tipo de control. Cero -se queja Antille.
Por más ciclovías
"Lograr convencer a las autoridades sobre la necesidad de construir las ciclovías fue una desgastante gestión que nos llevó más de dos años", recuerda hoy Maciel. Los vecinos lograron conformar una mesa integrada por especialistas, autoridades y vecinos, en la que se consensuó realizar la obra actual.
"Ya tenemos la ciclovía. Ahora estamos preocupados por el mal uso que se hace", dice Maciel. "Hay frentistas que ponen carteles, mesas y sillas, carribares o autos estacionados sobre la senda", enumera. "La historia de siempre", se lamenta.
Pese a estas dificultades los vecinos de la Costa van por más. Quieren ampliar la ciclovía de la autovía 1 hacia norte hasta la jurisdicción de Arroyo Leyes y hacia el oeste hasta la ciudad de Santa Fe, por la ruta nacional 168. "La idea es llegar desde el kilómetro 0 de la ruta 1 -donde llega hoy la ciclovía- hasta la Ciudad Universitaria en El Pozo, a donde termina la ciclovía de Santa Fe. Uniendo ese tramo conectamos toda la costa con Santa Fe", dice Maciel.
Para ello, la semana pasada se llevó a cabo una reunión de los vecinos de la Costa con las autoridades del 7mo. Distrito de Vialidad Nacional (porque la 168 es ruta nacional) para avanzar con la elaboración de un proyecto de ciclovía. "Lo que se acordó en esa reunión es trabajar en la elaboración de un pre proyecto junto a los municipios involucrados y a Vialidad Provincial para determinar su factibilidad", mencionó el vecino.
Unir la Costa con Santa Fe con una ciclovía es el sueño de los ciclistas costeños que viene luchando por ello desde hace varios años. "Esta extensión que hoy proponemos es más fácil de hacer que lo que ya se hizo, porque hay banquinas suficientes, hay espacio", dice Maciel.
-¿Cómo se salva el paso por los aliviadores de la ruta 168?
-Hay que analizar todas las alternativas. Una posibilidad es construir un carril voladizo para bicicletas, o estructuras más anchas junto al paso peatonal, ampliando el espacio hasta las barandas.
La concreción de la ciclovía de la costa todavía sigue siendo un sueño para los vecinos. Ahora comenzaron a dar los primeros pasos para concretarlo. Mientras tanto sigue siendo urgente ordenar el tránsito en toda la zona.