De la Redacción de El Litoral
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A siete días del derrumbe de la sección 126, que afectó unos 100 nichos, el municipio decidió habilitar el acceso al cementerio municipal, que había sido clausurado por precaución para evaluar los daños y las causas del desmoronamiento, y evitar riesgos para los familiares que concurren a visitar a sus deudos. El horario de apertura es de 7 a 12 y de 15 a 19.
En el ala sur del cementerio, hay un vallado que impide el acceso a todas las secciones que tienen comunicación con la 126, para que la gente no circule por el sector en el que se produjo el desmoronamiento. Hay un importante operativo del municipio, con participación de la Guardia de Seguridad Institucional (GSI) y el personal del cementerio, para custodiar el sector que fue vallado. “Se recomienda a quienes visiten la necrópolis local, respetar el vallado de seguridad, como así también se solicita atender las indicaciones del personal municipal”, indicó el municipio a través de un comunicado.
Los familiares siguen viviendo toda esta situación con angustia e incertidumbre. Esta mañana, una pareja pidió observar la sección 126, en donde estaban los restos de uno de sus familiares. Los empleados del municipio los acompañaron hasta el sector más cercano posible, de acuerdo con la disposición de las vallas. La pareja lo agradeció pero no se quedaron tranquilos, querían ver el féretro porque estaban preocupados por el estado en el que quedaron los restos después del derrumbe.
Otras familias venían con flores para sus seres queridos pero no podían dejarlas porque varias secciones de nichos quedaron dentro de la zona vallada. El municipio no permite el acceso porque tienen comunicación con el 126. También hay gente que todavía tiene dudas y quiere saber si el nicho de su familiar fue uno de los desmoronados.
Las obras
Roberto Celano, subsecretario de Ambiente del municipio, explicó que todo este sector permanecerá vallado, con postes, malla y nylon negro, hasta que el análisis estructural determine que no hay riesgo. “La prioridad es garantizar la seguridad de empleados y visitantes”, señaló.
Lo que se hizo esta semana es apuntalar la pared que divide la sección 127 de la desmoronada 126. También se procederá a la desocupación progresiva de los nichos de la sección afectada, que será demolida.
Celano aclaró que la sección 126 se cayó en bloque, y que los restos que estaban en los nichos afectados no se esparcieron. Por lo tanto, no será necesario realizar un trabajo de identificación forense.
El municipio evaluó que 698 de los 942 nichos que tiene la sección completa están vencidos, en condiciones de ser cremados. En el caso de los nichos vigentes, se habla con los familiares para decidir el destino de los restos.