Luciano Andreychuk
[email protected]
A un mes y medio de que se produjera, el socavón de Urquiza y bulevar Pellegrini sigue siendo noticia, ahora por las serias complicaciones que está produciendo como daño colateral en los vecinos y la actividad comercial de toda la zona, que sigue vallada. “Hay olores nauseabundos, baja presión de agua, y dificultades en la movilidad de los frentistas”, dijo esta mañana a El Litoral el senador por La Capital, Hugo Marcucci.
Pero además de afectar la vida cotidiana de los vecinos, preocupa cuánto impactó el cráter la actividad comercial de la zona: “Hoy hay unos 40 puestos de trabajo que están en riesgo, según relevamos desde los propios comerciantes”, aseguró el legislador, quien presentó esta mañana un petitorio en el Ente Regulador de Servicios Sanitarios (Enress) solicitando que se intervenga a la brevedad para garantizar que las reparaciones que debe realizar Assa se realicen con celeridad.
En el petitorio, se solicita al Enress que “monitoree e intervenga en el plan de trabajo para dar celeridad en las intervenciones; que brinde a los usuarios certeza sobre la fecha de finalización de las obras; que requiera a Assa un diagnóstico del daño y la causa del hundimiento”, como así también “el plan de obras previsto para sanear la zona afectada y el plazo de duración de dichas intervenciones hasta la reparación de la calzada”, entre otros requerimientos.
Más rapidez
“Hay mucha preocupación entre los vecinos, lo sabemos porque estamos en contacto con ellos: problemas de presión de agua, olores, la movilidad. Pero además, es seria la afectación a los comercios, a sus propietarios y a los empleados. Por eso, es fundamental que el Enress cumpla con su función de control; que pida el plan de trabajo y que exija la celeridad en la realización de la reparación del socavón. Es decir, que se haga todo cuanto antes”, declaró Marcucci.
El “mientras tanto” es el problema más urgente. Por eso, también se requirió al Ente que le pida a Assa la certeza la fecha en que se va a terminar la obra. “El Enress tendrá que informarle a los usuarios cuándo va a estar concluido el arreglo del socavón, incluyendo la pavimentación para normalizar el tránsito. Y que sea el garante y en el contralor de que todo se cumpla en tiempo y forma”, agregó.
El legislador había presentado un proyecto de ley a la Cámara Alta solicitando que los comerciantes del radio del cráter queden exentos del pago del impuesto inmobiliario, Ingresos Brutos y de las tarifas de los servicios públicos de agua potable, desagües cloacales y energía eléctrica hasta que se normalice la situación y se puedan paliar los efectos económicos adversos. “Hoy la merma de las ventas en la zona es muy significativa”, dijo.
Otro problema en puerta: casos de robos e inseguridad. “No tuvimos reclamos de los vecinos del área por delitos contra la propiedad. De todos modos, al estar vallada y cerrada toda la zona desde hace bastante tiempo, puede volverse potencialmente insegura”, dijo Marcucci.
Corralitos
El senador estuvo acompañado por el director de Derechos Ciudadanos del municipio, Franco Ponce de León, y la concejala Adriana Molina (FPCyS-UCR). El funcionario local ingresó un segundo petitorio en nombre del municipio al Enress, donde también se solicita al ente que actúe para garantizar una mayor celeridad en las reparaciones de los arreglos de los corralitos de Assa en toda la ciudad.
En esta petición hay un dato que surge de los registros del municipio: “En las últimas semanas de 2014 y principios de 2015, se registraron un promedio de 105 aperturas semanales en la vía pública. Y en la semana del 19 de enero pasado se constató un total de 109 aperturas”. Al día de hoy están registrados unos 90 corralitos existentes en toda la ciudad, no sólo en el micro y macrocentro. A eso deben agregarse 200 roturas de caños. Estamos pidiendo una solución de fondo”, agregó Ponce de León.
“Necesitamos que el Enress se involucre en el tema. El municipio sancionó el año pasado a Assa por demoras en los arreglos con multas por casi 400 mil pesos. Pero los problemas con los corralitos siguen. No queremos llegar a cobrar multas, queremos que se hagan los trabajos rápido, en tiempo y forma”, cerró.
Problemas
Los corralitos “generan congestión vehicular que se incrementa en horarios pico. El escaso margen dimensional que provocan en el ancho de la calzada afecta la circulación de vehículos de gran porte, como los colectivos de línea, que deben en muchas oportunidades modificar los recorridos programados debido a la congestión del tránsito”, sintetiza el petitorio ingresado al Enress por el municipio.