El agravamiento de situaciones de crisis subjetivas es uno de los efectos que se observan en la etapa post pandemia. Justo cuando los casos de Covid-19 disminuyen en nuestro país y en la provincia de Santa Fe, ganan un lugar central en la escena de la salud pública los efectos sobre la salud mental. Con esa premisa es que este miércoles se reunieron en el Cemafe autoridades del área y de diferentes estamentos de la cartera sanitaria para "establecer los circuitos de abordaje en situaciones de urgencias de salud mental".
Con esas palabras lo explicaba la directora provincial de área, Celina Pochettino quien, junto con el secretario de Salud Jorge Prieto dialogaron con la prensa en una pausa de la reunión a la que fueron convocadas autoridades de segundo y tercer nivel de atención, de la Región Santa Fe y de los hospitales generales de la ciudad.
"Sin duda estamos ante un agravamiento de situaciones de crisis subjetivas por el período de la pandemia y la crisis socioeconómica consecuente. Nos toca poner el sistema de emergencias y de atención a la altura de las circunstancias y hay un compromiso ministerial de avanzar respecto de esto", señaló Pochettino, en diálogo con El Litoral, para remarcar luego que todas estas acciones se encuadran en el Plan Provincial de Salud Mental.
La reunión de trabajo convocada para este miércoles tuvo por objeto "armar circuitos de atención, articular y potenciar la atención" para la población que lo requiera. "Sin duda ningún sistema de salud puede funcionar si no es en red y hoy estamos acá fortaleciendo nuestros lazos para armar una sinergia de esfuerzos y capacitaciones". Precisamente, el próximo 7 de diciembre se hará una capacitación en el abordaje de urgencias subjetivas para toda la provincia, destinada a efectores de segundos y terceros niveles, y a los sistemas de emergencia.
- Exponías que hubo un agravamiento en materia de salud mental como consecuencia de la pandemia, ¿en qué rasgos se observa?
- La pandemia nos ha afectado a todos, pero no a todos por igual. Sin dudas la difícil situación socioeconómica que atraviesa nuestra provincia, el país y todo el mundo a partir de la pandemia agravó los padecimientos en salud mental.
Nuestra principal atención es respecto de los usuarios de la población joven: vemos con preocupación las consecuencias del aislamiento social y la dificultad en los lazos sociales de los adolescentes. Tenemos una línea fuerte del abordaje de la problemática de los suicidios. También estamos fortaleciendo y refundando el área de infancia en Salud Mental. Otra prioridad es la población institucionalizada que es de las más vulnerables.
Pero todo esto no es posible si no fortalecemos el nivel primario de atención. Y sin duda es un desafío de Salud articular con otros ministerios porque entendemos que la salud mental es un problema de todos y no lo vamos a resolver solos. Por eso venimos trabajando con Educación, Desarrollo Social, Aprecod, Vivienda, Trabajo. Porque entendemos que la salud mental es un problema complejo y no solo tiene que ver con el padecimiento subjetivo sino también con la complejidad de los lazos sociales.
- ¿Ya se puede hablar de una pandemia en salud mental?
- Los organismos internacionales así lo citan. Podemos hablar de que la problemática de salud mental viene creciendo de manera alarmante y esos son los datos que tenemos a nivel mundial. Y diría que es uno de los temas de los que nos toca ocuparnos especialmente.