Leonardo Gustavo Núñez, más conocido como Tuti, es cordobés de nacimiento, pero desde hace casi 28 años se encuentra viviendo en la ciudad de Santa Fe.
Llegó a barrio Roma hace casi cinco años, en un primer momento recuerda "era una parte de la ciudad que la tenía olvidada, porque yo viví la inundación del 2003 , en la zona tenía amigos y no podía creer que estaba todo bajo agua. Entonces cuando buscaba casas, decía `vamos para otro lado, acá no´'".
Pero después fue mágico como se dio- cuenta Núñez- porque vuelvo de Tailandia, y tenía que buscar una casa, buscando qué alquilar llegó al barrio a ver una propiedad y una vecina me dice "Tuti, te venís al barrio, te doy el numero del dueño". Hablé con el señor, me alquiló y acá estamos.
En el interior de su casa se pueden encontrar títeres, marionetas y tanto color que llevan a despertar la imaginación. Tuti destaca Roma como un barrio de gente de familia de clase media. "Barrio Roma está en el medio entre el centro y donde termina la ciudad".
Tuti, personaje de la ciudad y de barrio Roma, tiene un largo camino recorrido en el mundo de la actuación y de contar historias a través de sus títeres. Él cuenta que empezó haciendo mímica y luego se fue hacia el teatro, posteriormente se volcó por los títeres cuando empezó a hacer cosas para niños.
Personaje inquieto y autodidacta que busca continuamente hacer cosas nuevas, comenzó a incursionar con los autómatas. Núnez trabaja en el Ministerio de Innovación y Cultura de la provincia de Santa Fe, un día una compañera de trabajo le pregunta si puede hacer un autómata para El Alero y "le digo si, si, después llegué a casa y digo, qué son los autómatas, nunca en mi vida había hecho uno, así que google. Primero dije cómo voy a hacer eso y bueno fui al taller del Molino y empecé. Hice el primero, el segundo y así terminé construyendo 30 y pico de autómatas en una semana y ahí me empezó a gustar".
Después vino la etapa de las marionetas y en estos momentos se encuentra realizando Stop Moition, "estoy fascinado, es un mundo para jugar", resalta Tuti.
"Empecé con la plastilina- continuo el titiritero- hice una animación para un festival de Ojo al Piojo internacional, que es de Rosario, a las dos semanas me dijeron que estaba dentro del grupo, no lo podía creer y hace unas semanas me dicen que había ganado como mejor corto de animación". "Donde pueda hacer arte y haya niños es mi lugar en el mundo", finaliza Tuti, el titiritero.