En los últimos días llamó la atención de conductores que circulan por la Ruta Nacional 168 a diario, una gran cantidad de árboles ubicados en cercanías a los guardarrailes que fueron tumbados, removidos, pero no de la forma adecuada de una tala controlada.
Las mayoría de los ejemplares que se tumbaron -espinillos, ombúes y ceibos- estaban en la zona comprendida entre La Guardia y el puente del río Colastiné. Desde Vialidad Nacional, organismo encargado del mantenimiento de esta ruta que une las provincias de Entre Ríos y Santa Fe, indicaron que cuentan con un contrato de desmalezado y que por cuestiones de seguridad vial deben dejar despejada de árboles la zona de la banquina.
Entre algunas especies que fueron removidas se destacan los espinillos, ceibos y ombúes. Crédito: Mauricio Garín
"Dado que más allá de la baranda metálica por la altura del talud sobre el que está la ruta elevada, debe tener un sector despejado. En todos los casos, si dejas que los árboles crezcan se te vienen contra la ruta, con el riesgo para un despiste que se ocasione o el vuelco de un vehículo que puede quedar fuera de la ruta, detrás de la maleza o los árboles y no ser visible", explicaron fuentes de Vialidad Nacional ante la consulta de El Litoral.
Al mismo tiempo informaron que para el corte de pasto en el sector lindante a la ruta es dificultoso con la presencia de los árboles. Frente a la consulta de la forma en la que procedieron a la tala, indicaron que "en los próximos días se emprolijará la situación de esos árboles que fueron removidos en parte".
Días atrás, en el marco de los trabajos de mantenimiento de la 168, Vialidad Nacional realizó mejoras en la demarcación horizontal en ambas manos, entre el Viaducto Oroño y el Túnel Subfluvial. También está prevista, en una segunda etapa, el pintado de las líneas de borde de las calzadas en todo el trayecto de la doble vía.