Gasoducto Gran Santa Fe: cómo son los trabajos para alcanzar el "túnel" más largo de Argentina
Hasta el momento se soldaron unos 4.000 metros de caño y se espera tener más certezas sobre el nivel de la Laguna Setúbal para comenzar la perforación, que cruzará a 25 metros de profundidad. Testimonios de tres trabajadores claves en esta etapa.
Gasoducto Gran Santa Fe: cómo son los trabajos para alcanzar el "túnel" más largo de Argentina
El 12 de octubre de este año, comenzaron las tareas para concretar el ambicioso Gasoducto Gran Santa Fe, que llevará gas natural a las localidades del área metropolitana de la capital provincial: Recreo, Esperanza, Monte Vera, Ángel Gallardo, Arroyo Aguiar, San José del Rincón y Arroyo Leyes.
Según explicaron los especialistas y consta en el plan de obra, se trata de casi 4.000 metros de traza, de los cuales 1.850 mts serán por debajo de la Laguna Setúbal, a 25 metros de profundidad.
A un mes del inicio de los trabajos, El Litoral recorrió el obrador y habló con tres pilares fundamentales de esta primera etapa. Un soldador, un radiólogo y el asistente en jefe de la obra.
El más largo de Argentina
Por estas semanas, donde el río creció, las tareas se focalizan en el soldado y armado de las cañerías que cruzaran el lecho de la Setúbal. “Por el crecimiento de la laguna no podemos hacer el cruce que estaba previsto; por eso van a encontrar el amontonamiento de caños. Creemos que en un tiempo no muy lejano podríamos hacer el cruce”, comenzó su testimonio Daniel Quiróz, asistente de Jefe de Obra.
-¿En qué consisten los trabajos actuales?, preguntó El Litoral.
- El tipo de soldadura que hacemos es con electródos, una vez terminada se hacen unas placas radiográficas que luego son verificadas por radiólogos nivel 2. Si está todo bien, se arena en la costura y se pone una manta termocontraible a modo de revestimiento para poder enterrar el caño.
-¿Cómo será la perforación?
- Con todo en condiciones, se prueba para que no haya una fuga eléctrica, se hace la zanja y se entierra. Se hace con retroexcavadoras, todas certificadas para estas tareas. Viene una “tunelera” dirigida que penetra el suelo, unos 25 metros de profundidad del lecho de la laguna, sale aquí y se engancha el caño. Con la misma máquina se tira el caño para que salga del otro lado. Si no hay complicaciones, serán unos 10 o 15 días de trabajo. Afecta el suelo y cómo se comporta; si la “tunelera” puede pasar bien. Es compleja la tarea, porque el túnel mide 1.850 metros, es muy largo y nunca se hizo en Argentina algo así. Estamos en condiciones de hacerlo.
Soldaduras y radiografías, vitales para el gasoducto
Como explicó Quiróz, en días anteriores se hicieron trabajos de soldadura y verificación de la cañería. Qué mejor que hablar con los especialistas en cada rama.
Por un lado, se entrevistó a Carlos que es uno de los encargados de soldar los caños. “Hace 43 años que hago soldaduras. Empecé en una empresa de La Plata, haciendo otras cosas pero vi lo que era soldar y me gustó. Mi patrón de aquel entonces me preguntó si quería aprender y le dije que sí. Me acuerdo que estuve en Villa Regina con caños de 30 pulgadas o Río Cuarto que hicimos 32 kilómetros para dos plantas”, arrancó.
Luego, el operario consultado detalló: “Nuestro trabajo consiste en la primera pasada y luego una limpieza para que quede bien. Después se hace el relleno completo de la soldadura, lo que serían unas tres pasadas para terminar. Cuando nosotros terminamos, viene la empresa que hace la radiografía para chequear que estén bien. Es como que se liberan los tramos para continuar los trabajos”.
A su turno, Matías Doldán (radiólogo industrial) explicó que están “desarrollando ensayos no destructivos en la soldadura de los caños que se hace para buscar defectos en las soldaduras y repararlas antes de seguir el proceso de construcción del gasoducto”.
En ese sentido, el especialista puntualizó: “Estamos trabajando con gammagrafía, una técnica utiliza un radioisótopo que emite rayos gamma y se imprime la placa radiográfica, luego se lleva al laboratorio para revelar. Se evalúa, y aprueba o rechaza la soldadura”. Acto seguido, aclaró Doldán que “cualquier obra de un ducto que lleve presión (oleoducto, gasoducto) se tiene que radiografiar y ensayar la soldadura. Si hay alguna falencia, se rechaza y se manda a reparar. Luego se vuelve a ensayar”.
Por último, El Litoral habló con el vicepresidente de Enerfe, Juan Cesoni, quien brindó un panorama respecto a cómo serán las próximas semanas de trabajo. “Estuvimos trabajando en los últimos 20 días en lo que son obras complementarias para poder realizar el trabajo de perforación. En estos momentos hay 4.700 metros desfilados, como se dice, en la zona del cruce. De ese total, 4.000 metros fueron soldados, es decir el doble de lo que necesitamos para cruzar la laguna”, señaló.
Además, aseguró que “este impass de 25 días (N. Del R: hace referencia al repunte del río Paraná) nos permitió avanzar con el tramo que necesitamos para cruzar la laguna sino también con otro adicional de 2.000 metros. Estamos previendo abrir nuevos frentes en Rincón y Monte Vera, es decir saliendo de la zona de la Setúbal”.
Y cerró: “El río creció un metro en 25 días, no nos preocupa el nivel del río porque para cada altura tenemos una técnica constructiva determinada, lo que nos permite tomar decisiones adecuadas. Complica un poco la variabilidad, que crezca rápido o que baje en pocos días. El gasoducto tiene unos 47 kilómetros de largo, de los cuales 4.7 ya están ‘tirados’ y 4 fueron soldados. La perforación dura entre 20 y 35 días ejecutarla pero se puede realizar en cualquier momento y se hace en simultáneo con otros trabajos”.