De acuerdo al reporte de la Guía Estratégica para el Agro (GEA) de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), ya muchos habían desistido de la siembra aunque las lluvias pronosticadas para esta semana se hubieran producido. Pero estas lluvias que no se dieron eran clave por otra razón, 20 milímetros, o al menos 10 milímetros, hubieran sido un auxilio fundamental para las 250 mil hectáreas que están en condiciones regulares.
“Se tratan de lotes sembrados con la humedad muy justa y están muy desparejos y perdiendo plantas. Pero también las lluvias eran claves en lotes que están buenos a muy buenos para evitar pérdidas de macollos y seguir el desarrollo sin resignar rinde. Y ya se empiezan a estimar pérdidas; algunos hablan de un 5% pero otros son más pesimistas y estiman mucho más“, explicó el trabajo.
“De continuar esta faltante de agua hasta agosto, podría haber perdidas de un 30%, ya que también hay que sumar la baja respuesta a la fertilización“, explicaron especialistas de Bigand. La fertilización es otro problema: muchas zonas sembraron con el agua justa y la fertilización quedó para cuando llueva. “Hoy la duda pasa por si re fertilizar o no, estamos esperando una señal”, comentaron esta semana algunos técnicos. Todos esperaban las lluvias. Lamentablemente, hay áreas donde la sequía ya es muy importante, en grandes zonas de Córdoba faltan 80 milímetros y hasta más de 100 milímetros.
Con respecto a las lluvias que se esperaban en los últimos días en la franja central, los profesionales de GEA se lamentaron: “Fue una gran oportunidad la que se perdió, este tipo de ingresos de humedad no es común en el invierno. El ingreso fue muy importante, pero no logró capitalizarse como lluvia en toda la franja central del país. Una vez más el agua fue para Buenos Aires: desde el centro al sur de la provincia hubo entre 10 y 55 milímetros en los últimos 5 días. También en La Pampa los registros fueron muy importantes con acumulados de 50 a 70 milímetros”.