La Superliga dio este jueves el primer paso hacia la eliminación de los promedios, en un almuerzo del que participaron representantes de 12 clubes, y aunque la determinación se tomará recién entre junio y julio, ya existe un consenso general para aprobar la decisión, informaron a Télam fuentes dirigenciales.
"Formal no hay nada, solo hubo un avance en esta idea. Seguramente en la reunión de Comité Ejecutivo saldrá aprobado, pero tienen que participar todos los clubes y también quedar definidos los ascensos de la B Nacional", le dijo a Télam un directivo que participó del almuerzo de hoy.
En la reunión, desarrollada en el hotel Savoy de esta capital, "solo estuvieron 12 clubes", puntualizó la fuente consultada por Télam.
Entre los directivos asistieron los presidentes de Boca Juniors, Daniel Angelici; de Racing Club, Víctor Blanco; de San Lorenzo, Matías Lammens; de Defensa y Justicia, José Lemme; y de Gimnasia (LP), Gabriel Pellegrino.
Con ellos estuvo también el presidente de la Superliga, Mariano Elizondo, y representantes de Colón de Santa Fe, Lanús, Argentinos y Rosario Central.
La eliminación de los promedios correría ya a partir de la temporada 2019/20, en la que participarán 24 equipos; aunque algunos dirigentes impulsan la idea de postergarlo hasta el torneo 20/21, que ya contará con los 22 clubes, que será la cifra definitiva para la Superliga.
El sistema de promedios para decidir los descensos, impuesto en 1982 y nunca del todo aceptado por protagonistas e hinchas, ya fue eliminado para los campeonatos de todas las categorías de ascenso (desde la B Nacional a la Primera D) y muchos directivos de la Superliga manifestaron públicamente la necesidad de imitar la decisión.
La idea terminó de tomar forma con lo ocurrido con Tigre en la última temporada de la Superliga: terminó en puestos de clasificación a la Copa Sudamericana, luego de una muy buena campaña de la mano de Néstor "Pipo" Gorosito, pero la pobre cosecha de los dos torneos anteriores lo condenó a la B Nacional.
El descenso le quitó la posibilidad de jugar la Sudamericana, obtenida por su rendimiento deportivo, y esta sensación de injusticia se trasladó después a la Copa de la Superliga: Tigre está a un paso de la final (lo que le daría, al menos, la clasificación a la misma competencia continental), y la Conmebol emitió un primer comunicado manifestando la prohibición de jugar los torneos que organiza a los equipos que no estén en la máxima categoría nacional.
Los reclamos de la Superliga, la AFA y la Confederación Brasileña de Fútbol presionaron sobre la Conmebol, que volvió sobre sus pasos; y la Superliga parece ahora tomar el mismo camino para evitar estas contradicciones.
De consumarse la decisión de erradicar los promedios después de la Copa América, los clubes más beneficiados serán Newell's Old Boys de Rosario (1,076), Gimnasia y Esgrima La Plata (1,076), Rosario Central (1,115) y Patronato de Paraná (1,134).
Ellos, sin contar a los ascendidos (Arsenal de Sarandí y el ganador del reducido de la B Nacional), comenzarán la próxima campaña con el peor coeficiente de puntos en las últimas dos temporadas.
De ese modo, los descensos quedarían definidos para los últimos cuatro equipos de la tabla de posiciones de la Superliga 2019/2020, criterio que se utiliza en las principales ligas del mundo.
En la reunión del hotel Savoy, también hubo acuerdo generalizado para dejar sin efecto las sanciones a San Lorenzo y Huracán, quienes fueron castigados por el Tribunal de Disciplina de la Superliga con la quita de seis puntos y la prohibición de incorporar en el próximo mercado debido a irregularidades administrativas en la declaración jurada de los contratos de los jugadores.
En reemplazo, los dirigentes acordaron modificar la normativa con penas más progresivas para aquellas entidades que tengan incumplimientos.