Todavía dura la alegría sobre los rostros de los colegiales. Lo cierto es que el conjunto que dirige "Patita" Mazzoni, estuvo durante 80 minutos dos goles abajo en el marcador y potencialmente eliminado de la Copa Santa Fe. Pero el fútbol, una vez más, dinámica de lo impensado, demostró que no todo estaba perdido para La Salle. Un gol de Nico Bianco a los 38 de la segunda etapa y el agónico tanto de Agustín Rodríguez en la última jugada del encuentro, le darían la enorme chance a La Salle de estirar la definición desde el punto penal. Allí, Lisandro Pérez se hizo figura y metió al lasallano en una nueva instancia de la Copa Santa Fe, dejando en el camino al "Tiburón".
Uno de los jugadores más importantes en estos últimos tiempos con la camiseta de La Salle es Agustín Rodríguez. Tuvo el privilegio de llenarse la boca de gol para que todo se decida en los penales y ser en cierta manera el héroe de una tarde que parecía oscura. El típico enganche (para muchos en extinción), de gran pegada y rapidez, hablo con El Litoral para contar sus sensaciones sobre el paso que depositó a La Salle en una nueva ronda de la Copa Santa Fe.
-Ingreso, definición y después...
-Si, siendo sincero no lo esperaba. Porque en realidad, ese día, venía con 90 minutos por haber jugado un par de días antes y no me sentía al 100% para entrar, pero el entrenador lo sintió así y me tocó ingresar. Pude ayudar para buscar la clasificación que es lo importante.
-El pedido del DT se cumplió, ¿fue así nomás?
-Sí, me dijo que entre y haga lo que siempre me sale, porque la cuestión estaba bastante complicada. El Quillá lo estaba haciendo muy bien y nosotros no encontrábamos el partido, algo que nos pasó en la ida y en el primer tiempo de la vuelta. Así que ese día en Santo Tomé entré a tratar de incentivar a los compañeros, ya que lo anímico para el que ingresa importa mucho, tiene que transmitir tranquilidad. El ingreso de Culler y Artigue también ayudó un montón. Así que traté de manejar la pelota y de que llegue al área de la mejor forma.
-Se dio todo de manera milagrosa, ¿crees que tuvieron una ayuda desde arriba?
-Se nos dio todo, parece que tuvimos ayuda de alguien más, fue imposible no pensar en Juan Carlos Lapalma. Porque se veía complicado el partido, la llave estaba casi perdida. Por eso cuando terminó, hablé con Nico Bianco y le dije que éramos unos privilegiados porque lo que nos tocó y nos toca vivir con esta camiseta. El plantel entrena para clasificar, gracias a Dios, estos partidos difíciles siempre los sabemos llevar adelante, más allá de que como te digo nos costó a lo largo de la llave encontrar el juego. Sabemos sacar el pecho en estos partidos y nos caracterizamos por eso.
-Lo que viene es Liga y Copa Santa Fe, ¿cómo se trabaja para seguir adelante en ambos frentes?
-Los que más minutos tuvieron han entrenado más leve en estos días. Pero la planificación es entrenar todos juntos y luego decidirá el técnico quienes son los que salen a la cancha. Particularmente me entreno al igual que todos para estar de la mejor manera posible cuando nos toque jugar.
Juan Carlos Lapalma, un ex jugador y entrenador ampliamente conocido en el fútbol local, falleció hace dos meses a los 75 años. De dilatada trayectoria como director técnico, fue el principal artífice de los campeonatos logrados en el 2013 y 2014 por La Salle. En dicho plantel comandado por el "profe", Agustín Rodríguez formaba parte, destacándose su labor con grandísimas actuaciones. Luego de la agónica y emocionante victoria frente a El Quillá desde los doce pasos, muchos de los históricos que tiene el club colegial miraron hacia el cielo y le agradecieron a "Juanca" por la ayuda. El profesor, sin duda, les dejo un legado que será eterno y que jamás olvidarán.
-No estuviste jugando durante mucho tiempo, ¿fue decisión tuya?
-Así es, el año pasado no disponía de los tiempos para entrenar por una cuestión laboral. Tenía en mente cerrar el ciclo también de la facultad, cosa que pude hacer ya que me recibí de contador. Por eso me tomé un descanso en lo que fue fútbol 11, igualmente me sumé al futsal de La Salle junto a Manuel Méndez y varios de los que pasaron por el plantel de primera, así que pude jugar un poco con otro formato. No es fácil dejar el fútbol de un día para otro, por eso ni bien me recibí me organicé para poder volver. Llegaba a un equipo campeón y con cierta vergüenza de entrar al vestuario, pero los chicos me recibieron y me hicieron sentir excelente.
-¿Cómo se entrena con tantas obligaciones fuera de la cancha?
-Mirá, yo creo que es fundamental cuidarse en todo sentido. Tener un buen descanso, porque uno trabaja y el cuerpo no responde de la misma manera que antes. Cuando sos joven no te cuesta, ya con 31 no es lo mismo (risas). Hay que tratar de sumarle el cuidado con las comidas y las salidas.
-Gol, festejo y dedicación, ¿quién estaba del otro lado del tejido?
-Si, fue porque del otro lado del alambrado estaba el padre de un gran amigo mío, y en la semana me había mencionado que tal vez podía ir a ver el partido. Y en ese momento me acordé de él, por eso le fui a dedicar el gol, es una persona que quiero mucho.
-Tanto ustedes como El Quillá tienen grandes planteles, ¿coincidís?
-Totalmente, de eso no hay duda. El Quillá tiene un gran equipo, y a su vez están muy bien preparados físicamente, corren los 90 minutos a muy alta intensidad. Me sorprendió para bien Augusto Álvarez, creo que se destacó mucho por el despliegue y cómo manejó la pelota. Creo que serán uno de los candidatos a pelear este torneo Clausura.
En la noche de éste martes, La Salle goleó 5 a 0 a Nuevo Horizonte. El equipo de Mazzoni adelantó su partido de la 3° fecha del Clausura de la Liga Satafesina ya que el próximo sábado, desde las 15, deberá recibir en Cabaña Leiva, a Libertad de Sunchales por el partido de ida de la Copa Santa. Los goles del triunfo fueron anotados por Martín Artigue, en tres oportunidades; Conrado Culler y Julián Lemercier. En reserva también fue victoria del colegial: La Salle 2 (Martino Rodríguez y Juan Rossi)-Nuevo Horizonte 0.