Algunas versiones dan cuenta que las negociaciones existentes entre Lewis Hamilton y Mercedes, para una extensión de contrato se habrían paralizado tras el Grand Prix de Mónaco, concretado el domingo pasado. Aparentemente, Toto Wolff, el jefe del equipo germano, habría recibido instrucciones del comando superior de Stuttgart, para detener momentáneamente las tratativas con el séptuple campeón mundial.
Vale recordar que Hamilton completó una clasificación decepcionante y luego lanzó duras palabras en una reunión con los técnicos del equipo, de la que también participó Wolff. Allí se resolvió efectuar algunas variantes en la parte delantera del W12. Sin embargo, los cambios no se adaptaron al estilo de conducción del inglés, quien en ningún momento pudo elevar su rendimiento, culminando en un modesto séptimo puesto.
Tenés que leerMax Verstappen es el nuevo líder del campeonatoEn declaraciones periodísticas, Hamilton argumentó que "no podría haber hecho nada mejor" y que Mercedes no le dio un coche competitivo en el Principado. Esas expresiones no fueron bien recibidas por el Team de Brackley. Además, la puesta a punto y la configuración del coche de Valtteri Bottas eran exactamente la misma que la del británico y sin embargo, el finés luchó bravíamente: no solo por la pole position, sino también por el podio, hasta que sobrevino el insólito episodio de la rueda trabada en boxes.
Según Motorsport.com, Mercedes quería moverse rápido y todo parecía indicar que Hamilton iba a firmar un nuevo contrato por un año (más la opción de una segunda temporada). Ya existía un acuerdo sobre un salario de 30 millones de euros anuales; es decir, 10 menos de lo que está percibiendo en 2021. Lo único que quedaba por negociar era el papel activista de Lewis y su trabajo para Mercedes en el momento en que se retire de la Fórmula 1.
Por último, vale consignar que Mercedes le había dado plazo a Wolff hasta mediados de junio para cerrar el trato, lo que ahora parece ingresar en un cono de sombras...