El arquero argentino Oscar Ustari fue uno de los protagonistas salientes de la victoria de su equipo, Pachuca, ante Monterrey por 5 a 2, en las semifinales de la Liga Mexicana, al cometer un penal, atajárselo a Rogelio Funes Mori, desmayarse, recuperarse y terminar el juego.
La otra gran figura de la noche fue el delantero Nicolás Ibáñez, ex Comunicaciones y Gimnasia (LP) y también de Pachuca, autor de cuatro de los cinco goles de su equipo.
A poco menos de 20 minutos para finalizar la ida de las semifinales, Ustari cometió un falta sobre Jesús Gallardo que el árbitro sancionó como penal.
En la jugada, el arquero recibió un golpe en la nariz que le provocó un sangrado y los médicos de Pachuca le pusieron un par de tapones para poder continuar en el partido.
Ustari se puso de pie, enfrentó a Funes Mori en el penal y atajó el disparo del goleador argentino nacionalizado mexicano. Sin embargo, durante el festejo por su atajada salvadora el ex Independiente y Boca se puso de rodillas y de manera dramática se desmayó en el terreno de juego.
"Me sentía muy mareado, con sensaciones raras porque por un error mío las cosas pudieron cambiar, pero la suerte jugó a nuestro favor. Me tiré y sentí un zumbido en la cabeza. Pregunté el resultado porque tenía una idea, pero quería estar seguro de cuánto íbamos", admitió.
Los médicos regresaron a la cancha a reanimar a Ustari y tras varios minutos el guardameta argentino se puso de pie y pudo terminar el encuentro sin problemas.
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