River finalizó las obras iniciadas en agosto del año pasado para disponer y disfrutar de un nuevo campo de juego, de última tecnología e inédito en el país y Sudamérica, que se estrenará este sábado ante Rosario Central por la Copa de la Liga Profesional.
El Monumental también fue sometido a refacciones en otros sectores: nuevos baños en zona de plateas, puestos gastronómicos y mejor accesibilidad para las personas que utilizan sillas de ruedas.
El presidente de Infraestructura de River, Mariano Taratuty, expresó su satisfacción por una obra que demandó al club más de 200 millones de pesos para un sistema similar implementado en estadios europeos como los de Barcelona, Real Madrid y Manchester United.
"Era una cancha que drenaba solo por el abovedado superficial hacia las alcantarillas de la pista de atletismo y de ahí a la fosa. Eso hacía que cuando llovía fuerte el abovedado no alcanzase y una capa impermeable de arcilla no ayudaba a drenar", indicó Taratuty en referencia a los problemas constantes que soportaba la cancha y que generó el llamado de atención del entrenador Marcelo Gallardo.
El césped de River no contaba con un tratamiento a fondo desde el Mundial de 1978 y a mediados de los ochenta empezaron los problemas.
El Monumental luce distinto desde adentro. Para el inicio de la obra, el campo de juego se bajó 1.80 metros hasta alcanzar un nivel óptimo definido por un estudio geotécnico.
El sistema de riego posee ahora 35 aspersores de control independiente con vástago de acero que cubre el ciento por ciento del campo híbrido.
Un programa de última generación y un sistema flexible con bombas de velocidad variable permiten utilizar la cantidad de aspersores necesarios, que son monitoreados a distancia para chequear las sesiones de riego, cantidad de agua utilizada y detección de fallas. Además, la calefacción automática cuidará la raíz de la planta.
Otro sistema de última generación se encargó del cosido de la fibra sintética, la cual abarca un 5% de la superficie total del campo.
Debajo del césped hay nueve capas más: tres superficies de geotextil ("si sube el agua no lo hará la tierra fina", explicó Taratuty); una de tosca; una malla impermeable; dos de piedra drenante; más 25% de arena.
Tenés que leer"A Gallardo le encantó el nuevo césped", afirmó el presidente de Infraestructura de RiverLa arena es un factor clave porque no permitirá ondulaciones en el campo. "Si veías el césped, había ondulaciones, y eso podía frenar la pelota. Eso ya no ocurre, ahora el campo es parejo en todos lados. Es más, había una diferencia de 30 cm. de alto entre un banderín del córner y el otro", detalló Taratuty.
El uso de un porcentaje mínimo de césped artificial tiene como objetivo que "la pelota no pique distinto" en comparación con un campo natural.
El responsable de la infraestructura en River confirmó que cuando estén dadas las condiciones con respecto a la pandemia de coronavirus, el Monumental podrá ser sede de recitales una vez más y la recuperación del pasto "será más rápida".
Los alrededores del campo también se modificaron. La pista de atletismo es historia y se planifica la instalación de nuevas tribunas para un total de 12 mil espectadores, lo cual permitirá agrandar la capacidad del estadio a 80 mil.
"Para cuando iniciemos esa segunda etapa, no perderemos la localía. Se puede hacer durante las competiciones", confirmó Taratuty, quien admitió que las medidas de restricción en el país, a través de la cuarentena, aceleraron el ritmo de trabajo para que River disponga del Monumental a partir de este sábado, tal como se estipuló en agosto de 2020.