Pablo Rodríguez
Pablo Rodríguez
Las jugadoras de básquet femenino adaptado, Silvia Linari (Santo Tomé); y Mariana Capdeville (Santa Fe), se encuentran en plena etapa preparativa para participar de los Juegos Parapanamericanos en Lima, Perú, con la Selección Argentina. Ambas “Lobas” (como se apoda al combinado albiceleste), integran los planteles profesionales del Centro de Integración Libre y Solidario de Argentina (CILSA).
Días atrás, estuvieron en el departamento General López, participando de sendos partidos amistosos frente a su par de Chile. Las actividades tuvieron lugar en Venado Tuerto, Firmat y Elortondo.
Las “Lobas” santafesinas, concentran cada 15 días, compitiendo a su vez en la 2º división de la Liga Nacional (hoy están en fase de ascenso). Algunas de sus compañeras, suelen integrar equipos mixtos tanto en primera como segunda división.
La santotomesina, de 41 años, tiene el honor de ser la capitana. Forma parte del plantel hace ocho años y es amputada desde pequeña. Llegó a ser “loba” por invitación: “Arranqué y me enamoré”, dice sonriente.
Cuenta que siempre estuvo rodeada de gente “convencional” y que su discapacidad nunca la afectó. “Cuando ingrese al mundo del básquet me hizo muy bien. Por eso siempre recomiendo que si tienen familiares o amigos en esta situación, se acerquen. Sentimos que la inclusión está creciendo. Y es importante que se visibilice”, agrega.
Por su parte Capdeville, tiene 38 años y vive en Santa Fe Capital. Su discapacidad es motriz. Tiene amputado su miembro inferior izquierdo y según sus propias palabras, le “regalaron” esa pérdida a los 17 años.
“Estoy en el equipo de Selección desde el 2010. Al tiempo comenzó a iniciarse la búsqueda de una identidad que en ese entonces vivía un pleno recambio. Todo lo que fue pasando en nuestro camino nos hizo dar cuenta de lo que somos. Y eso se nos fue revelando a cada una. En una concentración en Tucumán, después de Río 2016, comenzó a tomar fuerza y unidad el aullido de ‘Las Lobas’. Somos una manada que sigue creciendo y consolidándose”, asegura.
Mariana, recuerda que desde aquel entonces a la actualidad, la realidad del básquet femenino cambió porque la difusión fue “sumando más chicas con discapacidad” que eligen animarse a sentarse en una silla de ruedas para jugar al básquet. “Este es un deporte de equipo con recambios y hoy por hoy con mucho futuro. Nos merecemos todo en todos los aspectos. Justicia social, con o sin medalla, nuestro valor como deportistas es llegar a representar a nuestro país donde nos toque ir, dando todo y volviéndolo a dar en el día a día de ser argentinas”, amplia.
Meta
El objetivo de nivel internacional para “Las Lobas” se concretará en Perú desde el 26 de julio hasta el domingo 11 de agosto con la participación deportiva de los 41 países de américa en 39 disciplinas diferentes. Por eso el motivo de la visita de las deportistas al sur santafesino.
Al igual que lo hicieron hace poco “Los Topos”, jugadores de básquet sordos, deben recorrer el país para poder reunir fondos, ya sea por una módica entrada (ronda los $ 100) o el sorteo de indumentaria. En el medio, hubo gestiones de la Fundación Tendiendo Puentes, que viene desde hace tiempo apoyando a "Las Lobas".
Y es que últimamente, el recorte del apoyo del Ente Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (ENARD) fue “duro”. Ese cambio de políticas, les quitó una beca por no haber sido medallistas en los Juegos Paraolímpicos. No obstante, las santafesinas cuentan con apoyo del Gobierno de Santa Fe, algo que no se repite con jugadoras de otras provincias.
Seleccionadas
Las atletas convocadas para este desafío, son: Mariana Pérez, Vanesa Salcedo, Jazmín Sallis, María Chirinos, Julieta Olmedo, Mariana Redi, Fernanda Pallares, Silvia Linari, Evangelina Paiva, Mariana Capdeville, Dara Muñóz y Morena Coria.
En los Parapanamericanos, Argentina se medirá en la fase de grupos frente a México, Colombia y Canadá. El objetivo es clasificar entre los dos primeros del grupo. La idea es metese en semifinales y ahí pelear por un lugar en Tokio 2020.