Enrique Cruz (h)
Habló del fútbol de hoy, de las urgencias que tiene su equipo y dijo que “mi hijo me pregunta si algún día volveré a Colón y lo veo como una posibilidad en un futuro que hoy está lejano”.
Enrique Cruz (h)
Habló de todo Mario Sciacqua, el DT de Patronato, en una extensa charla en “La Primera” de Sol en la que dejó en claro que vive una situación límite, en la que cada partido es una final. Así lo declaró luego de ganarle agónicamente a Central. “Era una final para jugarla con el cuchillo entre los dientes”, fue su principal concepto. Y seguramente será la manera de encarar el partido del viernes en la avenida ante Unión.
¿Qué dijo Sciacqua?
* “Tengo que ser sincero y decirles que nosotros no alcanzamos los cinco o seis pases seguidos. Ésa es la autocrítica que hago de mi equipo. El domingo teníamos que ganar, fue un partido difícil, a Ortigoza no le podíamos sacar la pelota y corrió una barbaridad. “Gordo, ¿hasta cuándo vas a correr?, le dije... Si tenía un GPS, tan en moda últimamente, le debe haber dado que corrió como 15 kilómetros. Pero aparte metió pelotas finas, de gol. Y el final fue muy emotivo”.
* “Miren lo que le pasa a Carboni, me pongo en la piel de él y por ahora no tiene problemas con el descenso, pero si sigue así se le va a complicar. Los DT necesitamos más protección para que los contratos se cumplan. Ya ni hablo siquiera de proyectos, hablo de cumplimiento de lo que se firma”.
* “La Superliga te manda una estadística que nosotros también hacemos pero que en este caso es más completa. Desde que empezamos a dirigir, estamos entre los cinco equipos que menos posesión de pelota tienen, pero somos uno de los que más recupera la pelota y mete mayor cantidad de centros. Por lo menos, estamos pudiendo trasladar esta idea. Necesitamos tener mucha presión, ser constantes en eso. Y es lo que hemos inculcado”.
* “Les pido a los jugadores que hay equipos que tienen un plus y otros que no. Si Unión, que perdió 3 a 0, estaría en la posición nuestra, esa derrota con Godoy Cruz habría sido un fierrazo por la cabeza. Pero Unión está bien, remontó mucho su promedio y además venía de una gran campaña como local. Una derrota, por más dolorosa que fue, no le hace mella. A nosotros, nos dejaría tecleando. No porque perder un partido nos condene al descenso, ya que falta mucho. Sino porque generaría otra vez muchas dudas”.
* “Hablando de GPS, mis colaboradores me dijeron que en los partidos que perdimos, las mediciones fueron buenas, pero resulta que hicimos todo mal. Me dicen que un jugador corrió 11,5 kilómetros y capaz que lo hizo al divino botón. Igual que la recuperación. Me dijeron que la medición contra Lanús marcó que en los últimos minutos recuperamos 7 pelotas, pero resulta que lo fuimos a ver al video y sí, las recuperamos, pero las perdimos enseguida. ¿De qué sirvió?, de nada”.
* “Vélez termina ganando el partido ante Belgrano con una gran posesión, pero lo hace con un gol de media distancia y con un jugador más. Heinze, que es un técnico inteligente y vivo, debe haberse dado cuenta de eso. A veces, nos ha pasado de ver equipos que tuvieron mucha posesión, pero haciendo correr la pelota en lugares intrascendentes y sin ser agresivos para atacar”.
* “En el torneo pasado, Independiente y Lanús, por ejemplo, empezaban jugando, dando muchos pases y terminaban las jugadas. Cuando nos enfrentamos contra Independiente, Holan les gritaba a los jugadores para que ataquen, o sea que no le interesaba mucho la posesión. Defensa es un equipo que juega bien, pero con transiciones rápidas. Creo que el Mundial tuvo que ver. Francia defendía con los delanteros, pero cuando recuperaban la pelota, ‘iban en moto’ buscando el arco rival”.
* “Unión volverá a su sistema madre y que más resultados les dio. Con el 4-4-2 debe ser de los equipos que más aceitado tiene el sistema. Cuando Zabala se abre, el lateral va por dentro, y si se cierra, va por afuera, los delanteros entran y salen, es un equipo aceitado en la acción ofensiva y muy fuerte defensivamente”.
* “Cuando dirigía a Olimpo y vine a jugar contra Unión, mi equipo estaba planchado. Ahora es distinto, porque llegamos mejor. Además, lo tengo más estudiado a Unión, cosa que en ese momento confieso que no era tan así”.
* “A Troyansky lo tuve en Olimpo, es un gran delantero y ha entrado en un equipo con mucho funcionamiento, donde Gamba y Soldano se conocían de memoria. Eso puede tener sus cosas positivas y también negativas. Se lo dije a Madelón cuando me llamó para preguntarme por él, que tiene buen juego aéreo, se esfuerza en la presión y le pega con las dos piernas. No es una referencia de área. Es lo mismo que pasa conmigo: no es lo mismo Barcelo, que entra y sale permanentemente, que marcar a Rescaldani, que es de área. Esta clase de jugadores, como los que tiene Unión, son difíciles de marcar porque se mueven mucho”.
* “Sabía que me iban a preguntar por la reacción que tuvo Domínguez en cancha de Huracán... Conociéndolo a Eduardo, debe haber dicho ‘¡Qué cagada me mandé!’. Pero él tiene un vínculo con los jugadores muy fuerte. Para mí ya está minimizado el tema, porque tiene un vínculo fuerte con Ortiz, Estigarribia, Fritzler, Correa, los jugadores de mayor experiencia y que lo conocen y lo van a entender... A veces, los técnicos puteamos a los jugadores pero no es para meterle un cuchillazo. Por eso, cuando sale de la cancha y entra al vestuario, el jugador no dice nada. Lo toman como algo normal”.
* “No haría nunca las declaraciones que hizo Holan. En estos seis meses sin trabajo, me reuní con Madelón, con Domínguez, fui a ver los entrenamientos de Heinze, de Holan. Siempre quiero tener buenas relaciones con mis colegas. Hay cuestiones que los entrenadores tenemos que respetar, hay que pensar en el otro entrenador y saber si estamos hiriendo al otro DT con lo que decimos. Escuché que Gustavo Alfaro se sintió herido y lo entiendo. Una palabra de más, una apreciación equivocada, termina perjudicando al colega. Eso jamás lo haría”.
* “En caliente, cuando me fui de Colón, dije que no sé si volvería. Ahora estoy en Patronato y Eduardo es el técnico de Colón, o sea que cualquier especulación se hace para un futuro lejano, pero siempre pienso en que algún día volveré. Se lo dije a Santino, mi hijo, que es hincha de Colón y va a la cancha. Él me ha preguntado varias veces si volvería a dirigir a Colón y le dije que sí, que por supuesto. Son ilusiones que uno tiene y que se pueden dar o no. No sé si tomarlo como objetivo o ilusión, pero pienso en la posibilidad a futuro”.