El poder de compra de los argentinos en relación con productos tecnológicos de uso masivo, como una notebook, un celular o un Smart TV, es uno de los más bajos de América Latina, al punto que deben trabajar el doble que un uruguayo o el triple que un chileno para adquirir algunos de esos artículos.
La situación desfavorable del consumidor argentino respecto de los de los del resto de los países de la región, con excepción de Venezuela, es consecuencia del "menor nivel de oferta y producción, incrementos de costos, situación estructural de provisión de insumos y desequilibrio macroeconómico local", según el análisis de la consultora Focus Market.
La entidad comprobó que un argentino necesita trabajar 105 días para comprar una notebook de 15,6 pulgadas, mucho menos que los 531 días requeridos en Venezuela, pero más que los 91 días necesarios en Brasil, 76 en Paraguay, 62 en Bolivia, 51 en Uruguay y 50 días en Chile.
La situación es similar en el caso de un Smart TV de 43 pulgadas, para los que en el país se requieren 31 días de trabajo.
Nuevamente, el trabajador argentino sólo está en mejores condiciones que el de Venezuela, que necesita 168 días, pero en peor situación que el resto de la región, ya que son necesarios 29 días de trabajo en Brasil o Paraguay, 22 días en Perú, 21 en México o Ecuador, 20 en Bolivia, 19 en Uruguay y 15 en Chile.
La brecha se amplía en el caso de un celular de 64 GB, para cuya compra un argentino debe trabajar 60 días contra 220 de un venezolano pero 36 de un paraguayo, 33 de un brasileño, 25 de un boliviano, 24 de un uruguayo o 20 de un chileno.
El alto componente importado de la mayoría de los productos tecnológicos afecta por lo general al poder adquisitivo de la población de los países con monedas depreciadas respecto del dólar, como es el caso de la Argentina.
Al respecto, el director de Focus Market, Damián Di Pace, señaló que "los salarios medios de los argentinos medidos en dólares han recuperado terreno frente al 2020 debido a una apreciación del tipo de cambio oficial frente a la evolución de la inflación", luego de la pérdida de terreno que hubo en los años previos.
"Sin embargo, los precios domésticos de los bienes durables en la canasta de productos considerada en este informe, han tenido aumentos interanuales promedio del 75% muy por encima de la evolución del salario promedio en ese mismo período que ha sido en el orden del 43%", acotó.
Por tal razón, indicó Di Pace, "en Argentina se requieren más días para adquirir los mismos bienes en términos comparativos con otros países de la región".
Asimismo, remarcó que "el Gobierno lanza el programa Ahora 30 y 24 cuotas para oxigenar el bolsillo de los argentinos para estos bienes", aunque advirtió que esa oferta "no incluye los celulares".
En base a los informes de ventas minoristas de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), Focus Market señaló que las ventas minoristas de electrodomésticos aumentaron 0,8% interanual en junio y 19,6% en el primer semestre, ambas comparaciones afectadas por la caída de la actividad y el consumo en el inicio de la pandemia.
Si la comparación se realiza frente a los mismos períodos de 2019, tanto en junio como en el primer semestre se registran descensos del 14%, indicó.
Para la consultora, "si bien los planes Ahora son los más exitosos para financiar este tipo de bienes, hasta el momento no han alcanzado como única arma para recuperar el volumen de ventas pre pandemia, porque los argentinos tiene un problema de ingreso además de financiamiento".