El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) no puede otorgar nuevo financiamiento a la Argentina por factores que incluyen a "falta de transparencia e integridad financieras", advirtió el presidente de ese organismo, Mauricio Claver-Carone.
Mauricio Claver-Carone señaló problemas de transparencia, dudas sobre el cumplimiento de las metas del FMI y hasta el episodio del avión iraní como motivos.
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) no puede otorgar nuevo financiamiento a la Argentina por factores que incluyen a "falta de transparencia e integridad financieras", advirtió el presidente de ese organismo, Mauricio Claver-Carone.
En una columna de opinión, utilizó duros términos para hablar del financiamiento que el organismo multilateral otorga a la Argentina. Dijo no poder "dar el visto bueno" a nuevos fondos para la Argentina, que aguardaba el desembolso de unos US$ 500 millones para obras de infraestructura.
"Corresponde a las instituciones multilaterales adoptar las normas más estrictas de integridad y transparencia financiera y ayudar a sus países miembros a hacerlo también", se justificó Claver-Carone en una columna publicada en The Wall Street Journal.
Aludió a la llegada de un avión iraní a la Argentina que disparó una investigación por posibles vínculos con el terrorismo. "A diferencia del Fondo Monetario Internacional, cuyo mandato incluye el apoyo a las necesidades de liquidez de los países en crisis, la función principal del BID es promover el impacto del desarrollo a través de préstamos para proyectos específicos y asistencia técnica", explicó.
Recordó que la entidad desembolsó más de US$ 2.500 millones desde finales de 2020 para mejorar la atención sanitaria, el acceso al agua potable y la infraestructura vial de Argentina, así como para apoyar a las poblaciones vulnerables. Dijo que el BID está "deseando que Argentina cumpla los compromisos con el FMI para mejorar las condiciones macroeconómicas".
"Los compromisos, mucho más modestos que los exigidos a otros países, son clave para promover el crecimiento sostenible y garantizar que el BID pueda ofrecer a Argentina nueva financiació", advirtió. Alertó que el "tumultuoso historial financiero de Argentina afecta singularmente a los costos del banco. El BID debe proteger su capacidad de ayudar de forma fiable a todos sus 26 prestatarios, incluidos los países pequeños con pocos recursos".
Sostuvo que "por mucho que el BID quiera aprobar nuevos fondos para Argentina, no puede dar el visto bueno a las solicitudes para hacerlo sin asegurarse prudentemente de que tiene un impacto en el desarrollo".
El Gobierno argentino ha expresado en numerosas ocasiones su oposición a la gestión de Carone, quien fue designado durante la presidencia de Donald Trump, y promovió sin éxito para ese puesto a Gustavo Beliz, secretario de Asuntos Estratégicos y responsable de la relación con el BID y el Banco Mundial.
En la reciente cumbre de las Américas desarrollada en Los Angeles, el presidente Alberto Fernández cuestionó públicamente al titular del BID y a su par de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro.