El Índice Líder (IL), que busca anticipar cambios de tendencia en el ciclo económico, creció 0,22% en su versión desestacionalizada durante el pasado mes de junio. La serie tendencia-ciclo cae 0.12%.
En junio, según una medición privada, el ciclo de actividad en el país sostiene sus síntomas de recuperación tras la fuerte recesión del 2020 en medio de las restricciones por la pandemia.
El Índice Líder (IL), que busca anticipar cambios de tendencia en el ciclo económico, creció 0,22% en su versión desestacionalizada durante el pasado mes de junio. La serie tendencia-ciclo cae 0.12%.
De esta manera, la curva del indicador que elabora el Centro de Investigación en Finanzas de la Universidad Torcuato Di Tella, apunta a despejar, al menos en buena parte, un eventual nuevo ciclo recesivo en la economía argentina.
“En términos interanuales, el Índice Líder creció 11.11% con respecto a junio 2020 para la serie desestacionalizada y 14.00% en la tendencia-ciclo”, explica el informe del CIF, que dirige Sebastián Auguste.
El indicador evalúa el Índice General de la Bolsa de Comercio (IGBC), el Merval, el agregado monetario, el precio FOB oficial de las exportaciones de soja, las ventas de autos a concesionarios, la recaudación del Impuesto al Valor Agregado, el despacho de cemento al mercado interno, el Índice de Confianza del Consumidor (ICC) del propio Centro y los índices de Producción Industrial de FIEL para minerales no metálico y para siderurgia. Los valores se deflectan por inflación.
“De las series que componen el IL, cinco presentan variaciones positivas significativas. La probabilidad de salir de la fase expansiva en los próximos meses se ubica en 45.23%”, señala el informe.
De las siete comparaciones positivas, se destacan las subas del valor deflactado del Índice General de la Bolsa de Comercio, la recaudación del IVA neto de devoluciones, los despachos de cemento y el índice de producción de la siderurgia.
Señala el documento que mientras el ILCIF crece 0.22% en el mes de junio con respecto a la medición del mes anterior (11.11% con respecto a junio 2020), la serie de referencia -el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE)- en su versión desestacionalizada, mostró una suba de 0.72% durante abril 2021.
“Debe considerarse que la medición de junio 2020 se vio afectada por la caída de la actividad generada por la pandemia. Al ser inusualmente baja, la comparación interanual da lugar a una tasa de crecimiento relativamente del IL elevada”. aclaran los autores.
Leve caída
“La serie de tendencia-ciclo se ubica en 127.67 puntos en junio 2021 (2004=100). Esto representa una caída de 0.12% respecto del mes anterior. En lo referente a la serie de tendencia-ciclo utilizada como referencia (que presenta datos hasta abril 2021), se observa que el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) crece 0.41% respecto del mes anterior. La probabilidad de ingresar en una fase recesiva (desaceleración) se ubica en 45.23%
El EMAE cayó 2% en mayo
En mayo de 2021, el Estimador mensual de actividad económica (EMAE) registró una caída de 2,0% respecto a abril en la medición desestacionalizada. En la comparación interanual, evidenció un incremento de 13,6%.
De esta manera, en los primeros cinco meses del año el indicador acumuló un alza de 9,5% interanual. La totalidad de los sectores que conforman el EMAE registraron subas en la comparación interanual, a excepción de Agricultura, ganadería, caza y silvicultura que registró una caída (-4,3% i.a.) y restó 0,8 puntos porcentuales al nivel general.
Según el informe del Indec, entre los sectores que mostraron variaciones positivas, se destacó el alza de Otras actividades de servicios comunitarios, sociales y personales (+113,6% i.a.) y Hoteles y restaurantes (+54,3% i.a.).
Por su parte, Industria manufacturera (+29,9% i.a.) y Comercio mayorista, minorista y reparaciones (+23,3% i.a.) fueron los sectores de mayor incidencia en el nivel general: entre los dos explicaron casi la mitad de la suba interanual del EMAE.