En un escenario económico marcado por la inflación y la volatilidad en el tipo de cambio, la industria cárnica se enfrenta a considerables desafíos que podrían redefinir su dinámica en los próximos meses. Aumentos significativos en el precio del kilo de carne de cerdo y vaca generó preocupación tanto entre productores como consumidores.
Carne de Cerdo
El empresario Carlos Ingino, explicó que la reciente variación en el tipo de cambio, alcanzando los 340 pesos, impactó directamente en los costos de producción. "Estábamos varios puntos abajo, unos tres por uno, y ahora se está acomodando. Creo que en los próximos meses se empezará a estabilizar, pero mientras tanto, estamos experimentando una inflación monstruosa", expresó Ingino.
Además, detalló que el precio de la carne de vaca subió un 40%, mientras que el de cerdo aumentó un 13% la semana pasada y se proyecta un aumento adicional del 30% para la próxima semana. Estos incrementos, sumados a la liberación del tipo de cambio, que lleva el precio de exportación a 800 pesos, auguran una reconfiguración importante en los precios relativos del mercado.
Aumentos significativos en el precio del kilo de carne de cerdo y vaca. Créditos: Xinhua / Martín Zabala
Cuánto aumenta la carne
Por su parte el presidente de la Cámara de Frigoríficos, Sergio Rodríguez, compartió la inquietud sobre los aumentos en el precio de la hacienda, superando el 60% en algunos lugares. "Actualmente se sigue faenando y trabajando bien, pero creemos que es un período corto. A partir de enero, el consumo de carne podría caer debido al deterioro del poder adquisitivo, con el precio rondando cerca de los 10,000 pesos por kilo", advirtió Rodríguez.
Por otro lado, destacó la necesidad de adaptación en la industria, sugiriendo que los frigoríficos consumidores deberían considerar la exportación como una alternativa para contrarrestar la posible disminución en el consumo interno. "De lo contrario, se nos pondrá muy difícil trabajar únicamente con el consumo interno, ya que la gente buscará alternativas como el pollo y el cerdo ante la caída en el consumo de carne", agregó.
El precio de la carne de vaca subió un 40%.
La liberación del mercado tras la asunción de Milei permitió que los precios se sinceran en la calle, según Rodríguez. Sin embargo, advierte que la nueva medida podría abrir posibilidades para nuevos mercados, instando a los frigoríficos a explorar opciones de exportación, especialmente en países del Mercosur o aquellos con menores exigencias.
En medio de estas preocupaciones, la incertidumbre recae en cómo responderá el Estado Nacional ante este panorama. Se espera que tome medidas para evitar la emisión excesiva, el déficit fiscal y la persistencia de la inflación. La estabilidad económica, según los actores del sector, dependerá en gran medida de la capacidad del gobierno para gestionar estos desafíos.
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