Ése fue el pedido de Héctor Timerman. El canciller argentino apeló a la solidaridad de la comunidad internacional; en un reportaje a un diario de los Estados Unidos solicitó “a todas las naciones y organizaciones de buena voluntad” que ayuden a la Argentina a “deshacernos de ellos” (por los fondos buitre). “No vamos a premiar a los usureros que compraron bonos en default por centavos y se han negado a un acuerdo que les habría representado un claro beneficio, pidiendo mucho más, incluso varias veces la cantidad que gastaron”, aseguró el funcionario nacional.