El Gobierno dispondrá en las próximas horas el pase a retiro del jefe del Ejército, teniente general Roberto Bendini, procesado por haber cometido presuntas irregularidades en el manejo de fondos de una unidad militar de esa institución con asiento en Río Gallegos, Santa Cruz.
El anuncio lo realizó esta noche el jefe del Gabinete, Sergio Massa, que explicó que la presidenta Cristina Fernández "tomará la decisión en las próximas horas", acerca del destino de Bendini, tras el pedido de renuncia hecho por el propio militar.
"Simplemente (Bendini) ha planteado la situación y es la presidenta la que hará la evaluación de la situación y decidirá el futuro del comandante en jefe del Ejército. El planteó la necesidad de pedir su relevo y pase a retiro, en una presentación formal por escrito", señaló Massa en una conferencia de prensa en la Casa de Gobierno.
El funcionario precisó que "la toma de decisión de la Presidenta será en las próximas horas, mañana o pasado y no necesariamente debe ser ahora". Insistió en que "el general solicitó el relevo y su pase a retiro, fue una solicitud voluntaria del general Bendini".
Ocurre que la Cámara Federal de Comodoro Rivadavia procesó, sin prisión preventiva a Bendini por presuntas irregularidades en el manejo de fondos de la Brigada Mecanizada XI, que comandó hasta mayo 2003, antes de asumir como máxima autoridad del Ejército.
El fallo de los camaristas considera a Bendini presunto responsable de peculado, un delito que contempla una pena máxima de diez años de cárcel y la decisión de esa instancia judicial revocó una resolución del juez federal de Río Gallegos, Gerardo Caamaño, en la que se había dictado la falta de mérito de Bendini.
El pedido de pase a retiro de Bendini se registró mientras la ministra de Defensa, Nilda Garré, se halla en Chile, participando en los actos de por un nuevo aniversario de la independencia chilena.
En tanto, Garré había ordenado ayer el pase a disponibilidad de 13 militares, entre ellos dos generales de la cúpula del Ejército, como parte de la causa judicial en la que se investigan presuntos actos de corrupción en compras que se realizaron en esa fuerza.
Además, el Ministerio de Defensa amplió ante la Justicia la presentación realizada el último 8 de agosto por defraudación al Estado al denunciar supuestas acciones ilegales en unidades del Ejército. A comienzos del escándalo se pasó a disponibilidad a 31 militares y ahora se sumaron otros 13. Habrá más, porque la sospecha es que la defraudación era un mecanismo que atravesó a varias unidades militares.
Además de los militares, la nueva denuncia alcanzó a 29 civiles, en representación de 11 firmas.
En agosto pasado cuando Garré sacó a luz presuntos actos de corrupción en el Ejército por compras irregularidades, el fiscal federal Eduardo Taiano tuvo indicios que permiten sospechar que en esa fuerza se simularon competencias entre oferentes para adjudicar contrataciones determinadas de antemano.
Por la denuncia del mes pasado, 31 efectivos del Ejército, entre oficiales y suboficiales fueron puestos en disponibilidad. La causa se encuentra en el Juzgado Federal Número 6 a cargo del magistrado Rodolfo Canicoba Corral.
Los presuntos actos de corrupción se descubrieron primero en el Comando de Operaciones Terrestres, en Batallón de Intendencia 601 y en la Dirección de Asuntos Históricos del Ejército.
Al sospecharse que en estos lugares se cometieron irregularidades fueron pasados a disponibilidad los generales Eduardo Salvador Gibelli y Mario Fernando Troncoso; y los coroneles Néstor Hugo Korbs, José Luis Giro Martín, Andrés Andreotti, Oscar Rubén Frascaroli, y Alberto José Bonetti. También, fueron denunciados los generales retirados Raúl Horacio Gallardo y Héctor Mario Giralda.
DYN