Según informes recibidos este mediodía, la ciudad de Ceres, en el departamento San Cristóbal, vivía una crítica situación, generada por las intensas lluvias de las últimas 72 horas, que anegaron barrios bajos.
Durante la noche, la lluvia fue intensa y entre las 18 de ayer y las 10 de la mañana totalizó 220 milímetros. Este registro se sumó a los 140 milímetros de ayer, lo que ocasionó una amplia acumulación de agua.
La emergencia comenzó a evidenciarse en los barrios del oeste. En la zona sudoeste, próxima al club Central Argentino Olímpico, centenares de viviendas estaban afectadas. Muchas familias comenzaban a autoevacuarse, mientras las autoridades municipales ordenaban un dispositivo de asistencia a los damnificados.
Si bien esa parte de la ciudad está defendida por un terraplén, la lluvia acumulada fue de tal magnitud que impide el escurrimiento hacia el sudeste.
El temor de los ceresinos es que no sólo continúe el ciclo lluvioso actual, sino que el agua acumulada en la zona rural, en su desplazamiento, ingrese a la zona urbana y genere una emergencia mayor.