Esta segunda victoria del sexto jugador mundial lo pone en buena posición para clasificarse, aunque las dos plazas de semifinales del Grupo Oro serán muy disputadas.
Lo único seguro en esta llave es que el serbio Novak Djokovic ha quedado eliminado tras caer este martes ante el francés Richard Gasquet. Aunque gane el último partido, frente a Nadal el jueves, ya no puede entrar en semifinales debido a que su balance de sets perdidos y ganados no es bueno.
Para las dos plazas clasificatorias todo sigue abierto y puede darse que un jugador que haya ganado dos de los tres partidos quede eliminado.
De este modo, si Nadal vence a Djokovic en dos sets, como la baja forma tras una temporada agotadora hace prever, y Gasquet derrota a Ferrer en tres games, los tres jugadores estarían empatados con el mismo balance de sets perdidos y ganados, con lo que se contarían los juegos.
Antes de llegar a ese extremo, Gasquet debe ganar a Ferrer, lo que no parece fácil, teniendo en cuenta el gran nivel que ha mostrado el español desde que alcanzó las semifinales del US Open.
Tras vencer a Nadal en Nueva York en octavos de final, Ferrer ha ido ganando la confianza que faltaba a la solidez de su juego.
En Shanghai, frente a Nadal, el valenciano se impuso en el aspecto físico, lo que constituye una hazaña, teniendo en cuenta la resistencia del mallorquín en este aspecto.
Nadal, difícil vencedor de Gasquet en la primera jornada, parece pagar, como le suele ocurrir a finales de año, los esfuerzos de la temporada.
Semifinalista del Masters en 2006, no aprovechó este martes la ocasión de sacar su billete a la siguiente ronda, complicando su futuro en el torneo.
Con las derrotas de Nadal y Djokovic, así como las de Federer y Davydenko en la jornada del lunes, los cuatro primeros de la ATP han sido derrotados en el Masters.
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