Durante las primeras horas de la tarde del domingo se vivió un violento episodio en la cancha de Newell’s Old Boys de barrio Roma. Se disputaba el partido entre Newell’s y Las Flores II, correspondiente a la fecha 11 del torneo, cuando se desató una batalla campal entre los jugadores de ambos equipos. Los juveniles de las categorías 2005, adolescentes de 16 años, protagonizaron una gresca donde hubo golpe de puños y patadas.
El repudiable hecho se viralizó de forma inmediata a través de las redes sociales, por lo que Gustavo Pueyo, presidente de la Liga Santafesina de Fútbol, habló con El Litoral sobre lo ocurrido. “Me sorprende, son chicos de 15 años. Es triste lo que se vio y lamentablemente lo vio todo el país. Nosotros veníamos notando desde que se reiniciaron las competencias el nivel de violencia y frenesí tanto en los jugadores como en los padres afuera. A los árbitros se les hace muy complicado controlar eso”, expresó el dirigente.
En cuando a las medidas que se tomarán de aquí en más para evitar episodios similares, Pueyo mencionó: “ya estábamos trabajando en eso junto al municipio y el Concejo Municipal por charlas y talleres de convivencia. Estamos planificando todo eso para los chicos, profesores y padres y ahora surgió esto. Estoy tratando de acelerar todo para ver qué se puede hacer, pero todo esto empieza por casa”.
Una de las decisiones más tajantes que se podría tomar desde la Liga sería la eliminación del público. “Los padres ya no disfrutan y soy testigo. Cuando voy a la cancha veo a los papás y las mamás totalmente descontrolados gritándole a un árbitro, que puede tener la edad de un hijo de ellos. Teníamos pensado hace un par de años hacer unos jornadas sin padres, porque eran tanto los problemas que había. Pero con la pandemia había tanta necesidad de salir y ver a los chicos que lo descartamos. Pero ahora estamos pensando en eso nuevamente”, sostuvo Gustavo Pueyo.
Pese a que el presidente mencionó que lo ocurrido en barrio Roma “fue un hecho aislado”, también confesó que “hay clubes que tienen personal de seguridad en los partidos de inferiores, que es un gasto extra pero así han podido erradicar los problemas”.