El presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Ricardo Lorenzetti, consideró que hoy el Poder Judicial asume un papel relevante en la vida política e institucional del país, porque se ha cifrado en su accionar la garantía para los derechos de los ciudadanos. Y que ésto obedece a una mayor unidad y a la activa aplicación por parte de la Corte de los preceptos constitucionales, aunque advirtió que eso no debe conducir a una excesiva judicialización.
Al preguntársele si la inédita derivación de temas de alto voltaje político e impacto institucional a la Corte responde a que se aprecia mayor independencia en el organismo, consideró que “evidentemente, el Poder Judicial tiene hoy mucha más fuerza que en otros tiempos, porque está unido, está consolidado internamente. Y en particular, la Corte Suprema ha tomado muchas decisiones que le han permitido tomar un perfil como tribunal. Estas decisiones se refieren a proteger los derechos de los trabajadores, de los jubilados, los vinculados al medio ambiente, de propiedad, la división de poderes. Es decir, la Constitución. Entonces, si uno mantiene esa línea por encima de las disputas cotidianas, eso genera una credibilidad.
“Ahora, el exceso de eso sería que nos metamos en todos los problemas habidos y por haber. Y eso no es bueno, porque no podemos sustituir a los otros poderes, ni al diálogo que tiene que haber en la sociedad, para que no haya una judicialización excesiva de los conflictos”, sostuvo Lorenzetti.
El presidente de la Corte también aludió a los reclamos de los gobiernos provinciales, como los de Santa Fe, en virtud de los cuales el gobernador Hermes Binner será recibido en audiencia pública por el Alto Tribunal el 17 de marzo.
“Los conflictos del federalismo económico, cómo se distribuyen los fondos, es un problema histórico. Esto se discutió primero en las guerras, luego se hicieron las constituciones, se discutió en el Parlamento, y ahora, como tampoco funciona muy bien eso, se va a la Justicia. Ya no estamos felizmente en las guerras, pero deberíamos estar en el Parlamento. Bueno, como ahí no se soluciona, va a la Justicia. Entonces, como nunca en la historia, hoy tenemos a casi todas las provincias litigando, invocando sus derechos frente a la Nación”.
Lorenzetti declinó expresar que la convocatoria a audiencias implique haber asumido los argumentos de las provincias. “La audiencia es para escuchar los argumentos. Eso hace mucho a la transparencia y a la pedagogía. Como son audiencias públicas, eso se difunde, se escuchan los argumentos y eso da lugar a una discusión que mejora la calidad institucional”, concluyó.