En 2005, Piaggio había anunciado que para 2006 iba a estar listo el proyecto definitivo, porque la idea era licitar su construcción en 2007, pero ello no ocurrió todavía. Mientras tanto, el radicalismo local insiste con los planteos que definen su posición.
Sin ninguna duda, una de las problemáticas que volvió a tomar fuerza durante el desencadenamiento de la reciente emergencia pluvial fue la falta de un segundo enlace vial Santo Tomé-Santa Fe paralelo al existente, que ayude al histórico e inclaudicable Puente Carretero en su doble función de distribución del tránsito vehicular zonal y nudo regional de comunicaciones.
La sola idea de un posible colapso del nombrado nexo oscurecía aún más las jornadas de fines de marzo y principios de abril último, mientras en los alrededores de Santo Tomé se empezaba a vislumbrar un panorama de similares características al vivido en 2003 con la inundación del río Salado, cuando las colas de camiones se hacían interminables y el lento tráfico del transporte pesado le cambiaba la perspectiva y hasta el "paisaje" cotidiano a nuestra ciudad.>
De las palabras a los hechos
Si bien la catástrofe hídrica de este año ha modificado algunas prioridades y hasta ha obligado a las distintas administraciones a intensificar tareas de reconstrucción, aquellos que tienen por costumbre apelar al respaldo de la memoria recordarán que, en términos de decisiones políticas y de obras públicas, 2007 iba a ser "el año del nuevo puente", habida cuenta de lo anunciado oportunamente. Así lo hizo notar el propio intendente santotomesino Ángel Piaggio, quien en mayo de 2005 tenía como clara expectativa la licitación del mismo para 2007, para lo cual, con anterioridad, debían darse la elaboración de un anteproyecto (previsto para 2005) y la del proyecto de obra definitivo (para 2006), situaciones que, de acuerdo con lo recabado, aún hoy no han tenido concreción.
De todos modos, bien cabe agregar que -en el plano político, por así decirlo- las últimas actuaciones acerca del nuevo puente se dieron a principios de este año. A propósito de ello, en nuestra edición del 14 de febrero de 2007, dimos cuenta de las declaraciones del titular de la Dirección Provincial de Vialidad (DPV), Rubén Pirola, quien había hecho referencia al avance de los estudios para la construcción del moderno viaducto, en virtud del desarrollo, por entonces, del estudio de campo geotécnico y topográfico, en el marco de un convenio entre la Universidad Nacional del Litoral y la Universidad Tecnológica Nacional, con financiamiento del Consejo Federal de Inversiones (CFI). En dicha ocasión, el citado funcionario remarcó que dichos trabajos eran el paso necesario para la realización del anteproyecto y posterior proyecto definitivo para la construcción del nuevo enlace, el que, tal como lo aseguró en ese momento, tendrá un desarrollo aproximado de kilómetro y medio, y estará ubicado al sur del actual Puente Carretero.>
Al sur... pero, ¿por qué?
En cuanto al seguimiento del tema en el ámbito legislativo local, al empezar el período ordinario de sesiones, el radicalismo insistió -mediante un proyecto de resolución- en reclamarle al intendente Piaggio los estudios realizados para determinar que la traza más conveniente para el emplazamiento de la futura conexión vial Santo Tomé-Santa Fe sea la confirmada por la provincia, habida cuenta de que, al día de la presentación de dicha propuesta, ya habían pasado 250 días de corrido y 174 hábiles desde la primera comunicación hecha al Ejecutivo santotomesino para expedirse sobre el particular.
Justamente, para entender estos últimos párrafos, bien cabe recordar que, a fines de mayo de 2006, Piaggio mantuvo una reunión con el gobernador Jorge Obeid, en la que se confirmó que, de todos los proyectos analizados, los especialistas se habían inclinado por una de las opciones diseñadas al sur del Carretero, la que nace en cercanías de la Av. Ricchieri por el lado de Santo Tomé y desemboca en Santa Fe, a la altura de Varadero Sarsotti. Posteriormente, el propio titular del Palacio Municipal brindó detalles de lo actuado, los que fueron reflejados por este medio el 28 de mayo de 2006 en la nota "Santo Tomé y Santa Fe, unidas por el sur". Días más tarde, sobrevino el primer pedido de informes del bloque radical de nuestra ciudad -compuesto por Fabián Palo Oliver y Carlos Tepp-, solicitando los estudios técnicos ya mencionados. El segundo pedido, referido anteriormente, fue aprobado el mes pasado por el Concejo y remitido a la DPV con fecha 16 de mayo de 2007, y recibido un día después.>
"Que no ocurra lo mismo que con la defensa costera"
En contacto con Diario El Litoral, el edil Fabián Palo Oliver se refirió a su postura sobre la concreción de un nuevo puente, en virtud del seguimiento que, sobre esta cuestión en particular, desde hace mucho tiempo atrás viene realizando el bloque radical.
"Desde que se anunció que se había elegido la traza sur Av. Ricchieri-Varadero Sarsotti como el lugar en el cual se va a construir el puente, venimos insistiendo en que el costo de los trabajos aportados para los nuevos estudios (aproximadamente $ 270.000) era dinero mal gastado, porque quienes habían firmado el convenio de concreción de los mismos eran los mismos actores, prácticamente, que en 1999 habían evaluado siete posibles vías, cada una de ellas con sus ventajas, desventajas, problemas, potencialidades y conveniencias", declaró el concejal.
"Sostenemos que, institucionalmente fueron los mismos actores, porque en 1999 quienes practicaron los estudios fueron personal técnico del Ministerio de Obras Públicas de la provincia de Santa Fe y del área de Planeamiento de la Municipalidad de Santo Tomé, así como distintos investigadores y docentes de la Universidad Nacional del Litoral", agregó.
"Entonces nos llamó la atención, y a estos conceptos los hemos repetido en numerosas ocasiones, que en aquellos análisis se recomendaban como trayectos más convenientes dos trazas ubicadas al norte del Carretero actual, ambas con inicio en Santo Tomé en calle República de Chile: una con derivación hacia General López en Santa Fe y la otra por Mendoza", añadió después.
"Esa era la visión hace ocho años atrás y el gobernador provincial era el mismo que ahora, por lo que necesitamos saber cuál fue el criterio que finalmente se utilizó para elegir una y descartar otras, habida cuenta -también- que en 1999 se había determinado que la unión por Av. Ricchieri y Varadero Sarsotti era una de las que presentaba más inconvenientes, siendo que desde el año pasado a esta parte ya se confirmó como la que tendrá concreción", prosiguió Palo Oliver.
"Nuestra intención, además, es insistir en otro elemento clave y es el que la elaboración de un proyecto ejecutivo para la construcción definitiva del puente, puesto que no podemos permitir que la obra se empiece sin la totalidad de los estudios finalizados, como ocurrió oportunamente con la defensa de la Costanera". acotó.
Luego, finalizó: "Ha quedado muy en claro los trastornos, demoras y complicaciones que puede traer aparejado dar comienzo a la obra en las condiciones en las que tuvo inicio la protección de la margen derecha del río Salado, demorada y atrasada por los errores cometidos al principio, entre otras cosas por no haber licitado con un proyecto ya definido".
Sin respuestas
En el Concejo Municipal, el proyecto de resolución que consta como expediente N° 4473, por el cual se hizo un segundo pedido al Ejecutivo local de los estudios realizados para determinar la traza del nuevo puente que unirá las ciudades de Santo Tomé y Santa Fe, tuvo dictamen de la comisión interna de gobierno el 19 de abril pasado. Allí, se aconsejó aprobar dicha iniciativa, la cual debía ser dirigida a la Dirección Provincial de Vialidad, hecho consumado recientemente. Consultado sobre ello el edil Fabián Palo Oliver, aseguró que todavía no se había recibido respuesta alguna de parte de la citada repartición pública.
Ariel Durán-Sergio Ferrer