La presidenta Cristina Fernández desligó hoy a su gobierno de la responsabilidad de un supuesto aumento de la presión tributaria al asegurar que ‘no ha aumentado un impuesto‘ y pidió que se apunten las críticas al respecto a ‘gobernadores e intendentes‘.
En un discurso ofrecido por cadena nacional de radio y televisión, la jefa de Estado abordó la cuestión de la competitividad de la economía y en ese sentido rechazó las críticas de empresarios y economistas a la responsabilidad de su gobierno en el aumento de la presión tributaria, que algunos especialistas ubican en más de 40 por ciento del Producto Bruto Interno (PBI).
‘Este gobierno no ha aumentado un impuesto‘, señaló la primera mandataria, para luego remarcar que en caso de hacerlo es un paso ineludible pasar por el Poder Legislativo. En los últimos años, la mayoría de las provincias aprobó reformas tributarias con aumentos en varios impuestos, tanto en alícuotas como en el alcance de la base imponible, para financiar un incremento en los gastos corrientes que no puede ser totalmente financiado con las transferencias del Estado nacional.
En el mismo sentido actuaron los municipios, en este caso con aumentos en tasas y contribuciones. Por su parte, el Estado nacional, aprovechando el perfil de la estructura tributaria, se valió del aumento de precios para incrementar su recaudación sin necesidad de recurrir a la creación de nuevos gravámenes o al incremento de alícuotas de los ya existentes.
En ese sentido, los aumentos de precios implican una suba automática de la recaudación del IVA y del impuesto al cheque, además de representar un incremento en lo obtenido por Ganancias de empresas en la medida que no se aplican los ajustes por inflación.
Asimismo, el aumento de sueldos en porcentajes superiores a los ajustes al mínimo no imponible implica un incremento en la recaudación de Ganancias a la Cuarta Categoría por una doble vía: mayores aportes de los trabajadores que ya estaban alcanzados por el tributo y, además, la incorporación de nuevos empleados que antes de las subas salariales no estaban afectados.
Una situación similar se experimenta en el caso del impuesto a los Bienes Personales, cuyo mínimo no imponible está congelado hace por lo menos seis años, autónomos y el monotributo, con el pase de escalas de los aportantes. Asimismo, la Secretaría de Comercio Interior acuerda aumentos periódicos del precio de los cigarrillos con las dos principales compañías del sector, que a su vez aportan un anticipo a cuenta de la recaudación de los impuestos que gravan al producto.
DYN