Al menos no más problemas que los habituales para cargar, si lo que se procura es el mejor precio y los cupos no llegan a los surtidores locales. Pero no hay medidas de fuera previstas por empresarios ni por el gremio que puedan comprometer el suministro de naftas y gasoil en la provincia.
Así lo ratificó la Cámara de Expendedores de Combustibles y Afines de Santa Fe, que nuclea a empresarios locales que operan estaciones de bandera (indentificadas con la cartelería de las petroleras) o independientes.
En la provincia de Buenos Aires, en cambio, las estaciones “blancas” (no tienen la identificación de las grandes petroleras y son de pequeños empresarios) podrían parar. El presidente de la Asociación de Estaciones Independientes, Manuel García, advirtió que se venció la conciliación obligatoria en el conflicto que involucra a la Federación Obreros y Empleados de Estaciones de Servicio y Garajes de la República Argentina (Foesgra) en ese distrito.
Ese sector empresario y los empleados reclaman ante el cierre de estaciones independientes y en defensa de las fuentes de trabajo. García llevará su propuesta a la Mesa de Encuentro Multisectorial -que agrupa a los trabajadores y empresas del sector- para suspender el despacho de combustibles “el tiempo que haga falta hasta que el Gobierno y las petroleras brinden una solución sustentable que garantice la continuidad de las estaciones de servicio”, agregó.
El sector reclama por la renovación automática de contratos de abastecimientos, por el cierre de bocas de expendios y en defensa de la fuente laboral. Según estimó García, han desaparecido 3.300 estaciones de servicio desde el 2003 a la fecha. “El año pasado cerraron 300 estaciones de servicio”, puntualizó.