Tras ocuparse personalmente de la emergencia, el intendente de la localidad cordobesa de Santa Rosa de Calamuchita, Claudio Chavero, consideró que la tormenta que se cobró la vida de los dos scouts santafesinos fue ``anormal e impredecible''.
``No es frecuente este tipo de temporal en la zona. Los lugareños siempre saben cuándo va a venir una tormenta, pero en este caso se trató de un fenómeno impredecible'', recalcó el funcionario que se puso al frente del penoso suceso ``a pedido del gobernador'' cordobés Juan Schiaretti.
El trágico temporal duró unos 20 minutos y se produjo el sábado por la tarde en el establecimiento religioso Los Algarrobos, que funciona como camping y está ubicado en una zona rural camino a Yacanto.
``Fue un viento muy fuerte, como un tornado, de baja altura, con lluvia y granizo y que afectó sólo un sector de 2 por 3 km, muy focalizado. En Santa Rosa, que estamos apenas a 15 km, hubo una leve lluvia, nada más'', comentó Chavero a El Litoral.
El intendente, que además es el titular de Defensa Civil, estuvo en el lugar donde el grupo de scouts había instalado un campamento ese mismo sábado por la mañana. De acuerdo con su relato, ``al momento de la lluvia y granizo, los chicos buscan refugio en una carpa-comedor; se cae un pino arriba de la carpa y aplasta a uno de los nenes, que murió en el acto''.
En tanto, la otra víctima, ``fue arrastrada por un alud de barro y agua al momento que intentaba cruzar una quebrada con otras compañeras para refugiarse en las carpas en medio de la tormenta'', describió. ``Fue tanta el agua que vino por la quebrada en tan poco tiempo, que la correntada arrastró a la nena por lo menos 70 metros, hasta el río Santa Rosa. Luego, la policía encontró el cuerpo de la menor el domingo, 1,5 km río abajo'', detalló el intendente.
Chavero también se ocupó de recibir a los familiares de los chicos fallecidos y de organizar la partida del contingente a Santa Fe. Ahora, ``vamos a hablar con los curas encargados del predio Los Algarrobos para que nos pasen un informe.
Hace años que a ese complejo, que posee 130 hectáreas, viene a acampar gente de Santa Fe, Rosario, Buenos Aires. Creo que por esa experiencia, la tragedia no fue mayor''.
Fuerte, focalizada y de rápida formación
La tempestad se desató sobre una franja bien marcada que sufrió la caída de árboles, mientras que a pocos kilómetros no sucedió nada. Enrique Rodríguez, desde el Centro de Informaciones Meteorológicas de la Facultad de Ciencias Hídricas de la UNL (Fich), explicó que estos ``núcleos convectivos se forman con baja presión y en forma muy rápida''.
``Es como un trompo que sale del suelo y empieza a ascender con fuerza hacia arriba, tipo embudo; en ese giro tira árboles, levanta techos, tal como pasó en San Justo'', dijo el especialista climatólogo, quien denominó a ese fenómeno como ``tornado''.
``Abarca una pequeña zona, no grandes regiones, a lo mejor un terreno de 2 por 2 km y en ese espacio se produce el problema: cae mucha agua y piedra de golpe, más el viento fuerte de más de 150 km por hora, lo convierte en devastador'', calificó.
Rodríguez indicó que esta tormenta convectiva es impredecible y sólo se puede anticipar en el mismo momento que se produce dado que cuando avanza simula al sonido ``de una cuadrilla de aviones''.
Agregó que la región de Santa Fe, parte de Córdoba y provincias vecinas padecen un clima propicio para la formación de tornados. ``En esta situación de masa de aire cálida, inestable, en cualquier momento y lugar se pueden producir'', concluyó.