Contenido realizado con el colegio La Salle Jobson
En el corazón de barrio Candioti Sur de la ciudad capital, comenzó un sueño asociado a la educación, valores y comunidad que continúa vivo, dejando una huella imborrable en nuestra sociedad. Hoy, este legado convoca a celebrar juntos esta historia compartida.
Contenido realizado con el colegio La Salle Jobson
El colegio La Salle Jobson celebró este viernes 8 de noviembre su 120º aniversario de presencia en la ciudad de Santa Fe.
En el origen del Colegio Jobson, se relata que “Doña Flavia Sañudo de Jobson donó al Obispo de Santa Fe un terreno ubicado en la Avenida Costanera, donde actualmente se encuentra la Iglesia de Nuestra Señora del Huerto. Junto con el terreno, hizo entrega de $28.000 para la construcción de un asilo para huérfanos. Sin embargo, debido a que la suma no era suficiente, el Obispo Boneo, con la aprobación de la donante, decidió invertir el dinero en la construcción de una escuela de Artes y Oficios en un lugar más céntrico".
Así, "el 24 de junio de 1902 se inauguró el Colegio Jobson de Artes y Oficios, en el terreno donado por la Srta. Gerarda Candioti, en el actual barrio Candioti. El colegio quedó bajo la dirección del Pbro. Don Antonio del Castillo Jiménez".
"A pesar de las expectativas puestas en la institución, sus puertas se cerraron a fines de 1903 debido a diversos problemas. El proyecto que había comenzado como un gran aporte para el barrio y la ciudad se esfumaba en sus primeros pasos".
8 de mayo de 1904: la visita a Santa Fe. "En el trayecto hacia el Colegio San José en Córdoba, los Hermanos Jumaelien y Jadére decidieron desviarse a Santa Fe para asistir a la Solemnidad de la Virgen de Guadalupe. Ese día, visitaron a Mons. Boneo, quien les habló sobre el cierre del Colegio Jobson. Tras un almuerzo, el Obispo les propuso hacerse cargo de la institución. Con esta decisión, los Hermanos de La Salle plantaron la primera semilla de su misión educativa en la ciudad".
13 de septiembre de 1904: llegada de los Hermanos Fundadores. "El Hno. Joseph Jadére regresó a Santa Fe junto a los Hnos. Honorat Libier y Jérome-Ambroise. A pesar de las deficiencias del mobiliario y la inadecuación del edificio, los Hermanos asumieron el desafío de reabrir el colegio, tomando posesión del mismo; desde entonces se llamaría simplemente Jobson, pues había dejado de ser de “Artes y Oficio” para convertirse en Colegio Comercial, de acuerdo a las necesidades del barrio, ya que en el mismo se habían construido el Puerto y la Estación Central Norte del Ferrocarril”.
25 de octubre de 1904: los directores desde Francia. “Dos Hermanos directores de las Escuelas Cristianas, Juvénu y Jenofonte, llegaron a Buenos Aires desde Barcelona. El Hno. Jenofonte, quien sería el primer director del Colegio Jobson, dejó una marca indeleble en la institución. El museo pedagógico pastoral del colegio lleva hoy su nombre en su honor".
8 de noviembre de 1904: la primera Comunidad Lasallana en Santa Fe. "Nueve Hermanos, encabezados por el Hno. Jenofonte, llegaron a Santa Fe para formar la primera comunidad lasallana. Aunque existen algunas discrepancias en las fechas exactas de sus arribos, lo importante fue su misión compartida: comenzar una nueva etapa educativa en la ciudad".
2 de marzo de 1905: inicio de las actividades educativas. "Con un total de 147 alumnos distribuidos en diversos grados y clases, el Colegio Jobson abrió oficialmente sus puertas bajo la dirección de los Hermanos de La Salle. Entre las asignaturas ofrecidas se encontraban también clases de violín y piano".
La pedagogía lasallana no solo busca transmitir conocimientos, sino formar personas íntegras a través del amor, la empatía y el compromiso. Este enfoque ha sido clave en la educación de generaciones de jóvenes que han dejado su huella en la ciudad y más allá.
Un proyecto de Inspiración Cristiana. "Somos parte del Distrito La Salle Argentina - Paraguay, compartiendo con fuerza los principios y valores que sostienen y proyectan el futuro de la misión lasallana. Nos comprometemos con la educación en la fe, la justicia y el servicio a los más necesitados".
Misión Educativa. "Desde nuestros inicios, nos dedicamos a la educación de niños y jóvenes, creando un espacio de Encuentro Educativo donde dialogamos en torno a los saberes, fortalecemos nuestras relaciones y nos ayudamos en el descubrimiento de Dios y su Misterio en Jesucristo".
Un compromiso con la transformación social. "Somos una comunidad con un proyecto educativo al servicio de la transformación social, comprometidos con la educación integral y solidaria. Nuestro enfoque es formar personas con conciencia fraterna, capaces de construir un mundo más justo y equitativo”.
En el colegio La Salle Jobson brindamos una educación de calidad, con atención constante a las últimas tendencias pedagógicas y enfocados en el desarrollo integral de nuestros estudiantes. Los niveles educativos que ofrecemos son:
• Nivel Inicial
• Nivel Primario
• Nivel Secundario
• Escuela Especial
"Educamos con un espíritu fraterno y solidario, enfocados en el desarrollo de habilidades pedagógicas, artísticas, técnicas, deportivas y del idioma inglés, siempre buscando el bienestar y el crecimiento integral de nuestros alumnos".
Como parte del Plan Maestro para el complejo educativo del Colegio La Salle Jobson, se llevó a cabo un estudio orientado a identificar las variables que permitieron una mejora integral, a través de la construcción de una segunda planta en el ala norte de la institución, destinada a albergar la 4ta división del Nivel Secundario.
Este análisis nace de la necesidad de replantear los espacios educativos, adaptando los mismos a las demandas actuales de la sociedad del conocimiento. En ese sentido, este proyecto escolar replanteó las áreas de circulación y conexión dotándolas de identidad con el fin de promover el encuentro social y pedagógico.
El aula, en su estructura tradicional, continúa siendo el centro del proceso de Enseñanza/Aprendizaje, albergando el encuentro diario entre docentes y estudiantes. Sin embargo, el contexto sociocultural y las demandas de la sociedad actual exigen una revisión profunda de su configuración arquitectónica y funcional.
Es por ello que se han incorporado innovaciones tecnológicas para transformar la dinámica de enseñanza y ampliar las posibilidades de aprendizaje, adaptándolas a un entorno más flexible y estimulante. Se busca que el aula deje de ser únicamente un espacio cerrado y rígido para convertirse en un ambiente versátil, donde la tecnología facilite la colaboración, la creatividad y el intercambio. Así, el espacio se adapta a las diversas formas de aprender, promoviendo experiencias educativas más enriquecedoras, participativas y orientadas a la realidad actual.
Finalizado el proceso constructivo, se inauguraron las nuevas aulas, oficinas, salón de usos múltiples (SUM), sanitarios y diversos espacios diseñados para mejorar significativamente la experiencia educativa. Estos ambientes ofrecen infraestructura moderna y funcional, facilitando una gestión académica y organizativa más eficiente, permitiendo a la comunidad educativa disfrutar de instalaciones cómodas, seguras y versátiles.
María Eugenia Rosso, Directora General de la institución educativa, habló en el marco de las celebraciones por un nuevo aniversario del colegio: “Celebrar los 120 años de presencia lasallana en la ciudad es un motivo de mucho orgullo y mucha gratitud”.
“El principal desafío está basado en la formación integral de las personas. Nosotros buscamos, no solamente una formación académica de excelencia, sino que también buscamos la formación de las personas con sus valores, con su integridad, con ética y justicia social siguiendo los lineamientos de los hermanos lasallanos”, continuó comentando Rosso a la hora de hablar de los desafíos de la actualidad.
En vistas al futuro sostuvo que deben “continuar el legado de los hermanos junto a la inspiración cristiana. Toda la educación está enfocada hacia los que más lo necesitan, en valores y que sean hombres de bien. Y que el día de mañana cuando estén en la vida puedan recordar con mucho amor su institución. También a las personas que transitamos y lo acompañamos en este crecimiento.”
Por último, Rosso agradeció a todas aquellas personas que pasaron por el complejo educativo: “A los alumnos por seguir eligiéndonos. Vienen con mucha alegría que nos la transmiten y aprendemos mucho de ellos. A los padres por confiarnos su joya más importante que son sus hijos. Y a los docentes y el personal por toda su labor incansable que hacen día a día en la escuela”.
Claro está que en un evento de tal magnitud no podía faltar la presencia de los hermanos lasallanos. Estos componen una comunidad religiosa de varones que se sienten llamados por Jesús a colaborar junto a otras personas para la transformación de la sociedad a través de la educación, sobre todo hacia aquellos que sufren mayor pobreza y vulnerabilidad.
Entre tantas actividades y saludos protocolares, el Hno. Miguel Justiniano se tomó su tiempo para explayarse. “Nuestra idea de escuela lasallana siempre ha sido la posibilidad de que los chicos puedan encontrar y trascender su vida. Que puedan ir a las periferias, que puedan encontrar a Jesús en los más empobrecidos. Él está ahí esperándolos. La forma de llegar ahí es con educadores motivados que ayuden a los chicos para poder ir a esos lugares”.
Además, comentó que en la actualidad los educadores lasallanos encuentran la posibilidad y el desafío de cambiar la realidad, por lo que apuestan a su formación tanto en ciencia como en tecnología -más allá de la enseñanza en la religión-.
Minutos antes de comenzar el acto central de la noche del viernes, también se escuchó la voz de dos familias lasallanas que están entrelazadas por varias generaciones que han pasado por la institución.
En primer lugar, Luciana Picentini confesó que “la verdad que estar acá acompañando a la gente que forma parte de la institución me llena el corazón de alegría porque todos formamos una gran familia”. Hoy por hoy, seguimos eligiendo la educación lasallana por los valores que transmite la institución.
Por otra parte, la familia Godano reveló: “Somos una familia de tres generaciones en La Salle. Estamos muy contentos de estar compartiendo con los directivos, con los alumnos y con profes que se han jubilado. Es muy emocionante la verdad”.
“Siempre nos gustó lo que ofrece la escuela. Su propuesta educativa, que sea católica y que está en el barrio”, fueron los motivos de la elección escolar para sus hijos.
Nuestro colegio, fundado sobre los sólidos principios de la educación cristiana, se distingue por promover valores esenciales como la solidaridad, el respeto y la responsabilidad. Estos principios, fundamentales para la filosofía educativa de la institución, generan un ambiente de convivencia comunitaria y aprendizaje colaborativo que beneficia a todos los miembros de nuestra comunidad educativa.
El compromiso con una educación integral se extiende más allá del aula, motivando la participación de los estudiantes en una amplia gama de actividades extracurriculares, como talleres, deportes, y proyectos solidarios y de impacto social. Estas experiencias complementan el currículo académico, reforzando en los jóvenes un profundo sentido de responsabilidad social y una conciencia comunitaria que enriquecen su formación.
Promovemos una educación orientada hacia la justicia social y el apoyo a los sectores más vulnerables de la sociedad. Para nosotros, los lasallanos, es una acción fundamental reconocer y atender las necesidades de los más desfavorecidos, principio que dio origen a la obra de San Juan Bautista de La Salle. Este legado sigue inspirando nuestras acciones y responsabilidad hacia los demás.
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