Santiago Maratea es un influencer que, utilizando su poder y su llegada en redes sociales, lanzó una colecta para comprar una ambulancia. La misma será destinada a una comunidad Wichi que actualmente no tiene acceso al sistema de salud.
Santiago Maratea es un influencer que, utilizando su poder y su llegada en redes sociales, lanzó una colecta para comprar una ambulancia. La misma será destinada a una comunidad Wichi que actualmente no tiene acceso al sistema de salud.
“Te hago una pregunta, ¿tenés $ 10?” interpeló Maratea a sus seguidores. El cálculo que hizo fue simple: para llegar a comprar una ambulancia necesita 2 millones de pesos. “Si todas las personas que miran mis historias ponen $ 10, llegamos” advirtió el influencer.
De esta manera comenzó una movida solidaria que, a las 5 horas de haber comenzado, ya llevaba más de un millón de pesos recaudados. La jornada del martes terminó con 1.5 millones acumulados en la cuenta de Omar, un joven Wichi.
Omar pertenece a una comunidad Wichi cerrada de 5 mil personas, en Salta. Es el primero en “salir”, y se fue a Buenos Aires con el objetivo de aprender español y de estudiar abogacía para poder ayudar y asesorar a su comunidad, constantemente devastada por falsas promesas políticas.
En una primera instancia, Santiago Maratea colaboró para conseguirle un trabajo en CABA. Con la pandemia, quedó desempleado. El influencer organizó una primera colecta que tenía a Salta como destino, para comprar alimentos. En esa oportunidad se habían recaudado más de $ 800.000.
El siguiente objetivo fue aún más ambicioso: juntar dos millones de pesos para comprar una ambulancia que permita acercarle a esa comunidad alguna facilidad dentro del sistema de salud, hasta el momento nulo. Maratea contó la realidad que viven las personas Wichi, que viajan kilómetros y kilómetros “con el apéndice explotado” (si es que consiguen quién los lleve) hasta el nosocomio más cercano.
Esa dura realidad y su vínculo con Omar, hicieron de un instagramer, un puente entre la gente solidaria con deseos de ayudar, y la necesidad misma. Santiago les dio la posibilidad a todos sus seguidores de contribuir en una causa noble, con un impacto real.
“Tengo un poco de emoción y de vértigo. Es una locura que los influencers y sus seguidores puedan llegar a organizar a la vez y comprar una ambulancia para una comunidad que el estado olvida”, expresó Maratea. Y agregó en una de sus historias: “No subestimen el ocio productivo”.