Viernes 3.4.2020
/Última actualización 10:54
Después de “Oscillations” (Paraty, 2015) y “Dualità” (Paraty, 2017), discos que merecieron los elogios de la crítica especializada por la sutileza en su interpretación y la trascendencia de sus repertorios (Satie, Glass, Duckworth, Cage, Goreki, Rudhyar), Silas Bassa sorprende con “Silas” (Klarthe Records/Pias Distribution, 2020), su disco más íntimo, de próxima aparición.
Bassa es compositor e intérprete de cada una de las diez piezas presentadas en esta placa. Como anticipo, hoy viernes 3 de abril ve la luz “Katia the runaway”, primer corte de difusión del álbum: el mismo cuenta con un videoclip dirigido por Patrice Masini (en blanco y negro, con una estética que remite a la Nouvelle Vague), con el protagónico de la actriz y bailarina franco-argelina Sofia Boutella, de gran actividad en Hollywood y el cine europeo (“Star Trek: sin límites”, “La Momia”, “Atómica”, “Clímax”).
“De la ensoñación sensual a la furia combativa, pasando por el diálogo interior, la danza, el drama o la fantasía, Silas Bassa nos invita a recorrer un universo sensorial pleno de profundas sugerencias poéticas”, dice la presentación de este nuevo material. El Litoral dialogó con el artista para conocer más sobre ese mundo propio.
—Tu primer disco, “Oscillations”, estuvo dedicado a compositores contemporáneos; el segundo, “Dualitá”, ya integraba composiciones propias. ¿Sentís que ese camino te fue llevando a la a este tercer disco (que lleva tu nombre), el primero íntegramente compuesto por vos?
—¡Totalmente! Mi primer disco es una selección de 20 piezas (de fuerte influencia del movimiento de la música minimalista-repetititva y también algunos tangos contemporáneos) de las cuales dos son mías y que se ensamblan en un orden preciso de encadenamiento y continuidad. Con mi segundo disco continué este concepto de crear una obra total a partir de una selección de diferentes piezas y compositores modernos y contemporáneos pero también con el desafío de incluir nuevamente mis composiciones y esta vez fueron ya cinco (entre ellas “Santa Fe”). Al momento mismo de terminar de grabar este segundo álbum (principio del 2017) tuve la certeza que había llegado al resultado mas alto de lo que podía crear con este concepto y supe que mi próximo paso “evidente” sería la realización de un álbum enteramente de mis composiciones y explorar libremente todas las posibilidades como compositor-interprete a través de mi piano.
—¿Cómo fue el proceso de creación de las diez obras que lo integran?
—Comienzo siempre a partir de momentos de improvisación al piano y voy anotando ideas que me gustan y que voy trabajando poco a poco. El proceso fue largo, ha durado un poco mas de año y medio; y se fue haciendo de manera intermitente ya que durante ese tiempo seguía dando mis conciertos y promocionando mi disco del momento, “Dualità”. Luego me propuse momentos en los cuales solo me dedicaba a trabajar en estas nuevas obras. Por ejemplo un momento fundamental fue el verano del 2018, en el cual me encerré “confinado” en un castillo del siglo XVI en el centro de Francia, con mi gato y con un maravilloso piano Steinway, y allí avancé enormemente. De la misma manera trabajé este ultimo verano 2019 pero esta vez en el norte de Italia, en una “Villa” histórica, rodeado de montaña, y cerca de donde provienen mis orígenes italianos. Es un trabajo muy solitario y estar en lugares neutros y en contacto con la naturaleza me ayuda a la concentración e inspiración.
—¿Cómo influyó tu faceta de intérprete, trabajando distintos compositores, a la hora de formar tu propio lenguaje? ¿Quiénes sentís que son tus maestros a nivel composición, y en qué sentís que los estás trascendiendo?
—Fue fundamental para mi formación como compositor. He sido muy afortunado de haber tenido la posibilidad desde tan pequeño de estar en contacto directo a través de las partituras de músicos tan extraordinarios y diversos. Siempre me atrajo todo tipo de música pero a la hora de sentarme al piano mi placer mas grande era descubrir e interpretar a los grandes compositores del siglo XIX y XX.
Luego con los años me fui interesando mas en la música actual, y de a poco fui descubriendo que había otros lenguajes posibles en la música y en el piano hasta llegar a la música de Philip Glass, lo cual marcó un antes y un después en mi carrera de pianista “clásico” hasta ese momento, y que me inspirara mas adelante para animarme a expresarme también a través de la composición. Junto a Glass, otros compositores como Arvo Pärt, William Duckworth, Michael Nyman, Max Richter, Steve Reich etc., han sido de gran influencia. Pero también creo que mis influencias se mezclan con otros tipos de música que he escuchado mucho mas pop y rock y por supuesto mis raíces argentinas (tanto por el lado del tango como el folclore y música popular).
—El primer corte de difusión del disco es “Katia the runaway”. ¿Por qué elegiste esta obra para presentarlo en sociedad?
—Esta pieza encierra muchas cosas de todo lo que vengo diciendo hasta ahora sobre la complejidad de estilos tan variados que me han inspirado en mi vida musical. Creo que se puede escuchar mucho de mi lado “argentino” y al mismo tiempo es una música muy cinematográfica y de colores, armonías y ritmos muy diversos. Me gusta también la energía que transmite, y es además un homenaje a mis grandes amigas, las fabulosas pianistas hermanas Katia y Marielle Labéque.
—El lanzamiento viene acompañado por un videoclip dirigido por Patrice Masini, con la participación estelar de Sofia Boutella. ¿Cómo surgió la idea y cómo fue el proceso de hacerlo?
—Conocí a Patrice Masini hace unos años cuando participé de un documental que produjo sobre la Academia de Música en la cual trabajé junto a Philippe Jaroussky. Desde entonces sabíamos que un día trabajaríamos juntos en alguno de mis proyectos. Fue esta una gran ocasión de poder contar con su talento de director. Luego tuve la fortuna de conocer a Sofia Boutella gracias a Katia Labéque, quien nos presento a fines del año pasado. Sofia presenció un concierto privado mío donde tocaba por primera vez “Katia” y le gusto mucho. Fue entonces que le conté sobre mi proyecto de clip con Patrice y le propuse actuar el rol de Katia. Fue un regalo de la vida poder contar con tan increíble colaboración, jamas lo hubiese podido imaginar.
—Ya habías hecho clips para piezas de “Dualitá”. Por un lado es innovador para el ámbito de la música académica, pero al mismo tiempo muestra una faceta visual que se combina con tu música, como que eso está en la obra. ¿Lo ves así? Más allá de eso, ¿sentís que es una forma de saltar de la batea de “classical” y llegar a nuevos públicos?
—Tiene que ver con mi cultura. Soy un gran “amateur” de cine (¡pasión heredada de mi madre! ) y siempre estuve interesado en la música relacionada a la imagen. De chico y adolescente me pasaba horas mirando la MTV. Quien hubiese dicho,como fan de Madonna, que un día podría contar con la colaboración de una bailarina y actriz tan maravillosa como Sofia para mi clip, ¡a quien Madonna y Michael Jackson se disputaban para tenerla en sus giras! La magia de la vida.
—Te tocó un año complejo para mostrar este trabajo. ¿Qué tenías pensado para este lanzamiento y cuál es la expectativa ahora?
—A pesar del contexto muy extraño y confuso decidimos seguir adelante con el lanzamiento del disco y del videoclip como lo teníamos previsto. Creo que mi música puede traer un mensaje positivo en estos momentos. Y además me sumé a la idea de poder ofrecer mini conciertos desde casa en este período. Hice uno junto al Teatro del Bicentenario de San Juan y el jueves 9 de abril presentaré otro junto a un festival de Francia, “1001 notes”. Hay que ser creativos y saber adaptarse mas que nunca a los cambios. Espero que pronto pueda iniciar mi gira en la Argentina como estaba previsto, y poder venir a presentar este disco en vivo en cuanto las salas vuelvan a abrir.