Desde el año 2007, el primer viernes de agosto se celebra el Día Mundial de la Cerveza. La celebración comenzó en Santa Cruz, California y desde entonces, se extendió cada vez más. En la actualidad, se celebra en 50 países.
La celebración comenzó en Santa Cruz, California y desde entonces, se extendió cada vez más. En la actualidad, se celebra en 50 países.
Desde el año 2007, el primer viernes de agosto se celebra el Día Mundial de la Cerveza. La celebración comenzó en Santa Cruz, California y desde entonces, se extendió cada vez más. En la actualidad, se celebra en 50 países.
La cerveza nació hace más de 5.000 años cuando se descubrió que a partir de la fermentación de algunos granos como la cebada, se producía una bebida muy gustosa.
En Argentina, se consumen aproximadamente 45 litros per cápita y se producen cerca de 20,4 hectolitros al año. Se trata de una cadena de valor importantísima que involucra a cientos de actores diferentes a lo largo del país y da empleo a más de 127.500 personas.
La tradición cervecera argentina tiene más de dos siglos de antigüedad, cuando en 1742 se inauguró el primer local cervecero en el barrio de Retiro, Buenos Aires. Hoy, la cerveza conforma una importante agroindustria que elabora 20,4 millones de hectolitros anuales con insumos y recursos humanos que son nacionales. Esto significa que el 99% de la cerveza que toman los argentinos es producida con materias primas locales.
A su vez, el impacto sobre las economías regionales es muy significativo, al emplear a más de 127.500 personas, a través de 9 cervecerías, 6 malterías, 250 distribuidores y más de 1.500 productores agropecuarios de todo el país.
De esta manera, la agro industria cervecera es el sector que lidera las inversiones en el país de bienes de consumo, con anuncios de inversión 2016-2020 por 1.855 millones de dólares.