Banda de la "Curandera": aceptaron condenas de hasta 10 años de cárcel
Este lunes estaba previsto el comienzo del juicio oral y público, pero los acusados -diez en total– cerraron acuerdos de juicio abreviado con la Fiscalía para evitar el debate.
Archivo El Litoral La banda operaba en una mansión de barrio Guadalupe, por la cual una policía había pagado un año de alquiler de contado.
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Una decena de personas, entre ellas la "curandera" Vanesa Saravia y su esposo Martín Albaristo, aceptaron condenas que van de los 2 a los 10 años de prisión, como organizadores y miembros de una banda de traficantes de cocaína que tenía como centro de operaciones un caserón del barrio Guadalupe, en la capital santafesina. El caso fue presentado como el secuestro más grande de la historia de la ciudad, con un total de 143 kilos de cocaína.
El grupo debía enfrentar un juicio oral que tenía como fecha de inicio este lunes -20 de septiembre-, pero las defensas de los acusados optaron por la vía del juicio abreviado y un mes antes comenzaron las tratativas para alcanzar acuerdos individuales con el fiscal general Martín Suárez Faisal, que el pasado viernes logró cerrar el último trato y así evitar ir a juicio.
Finalmente este lunes se llevó a cabo la denominada audiencia "de visu", dirigida por el juez del Tribunal Oral Federal, Luciano Lauría, ante quien cada uno de los acusados ratificó su voluntad de sumarse al acuerdo.
Entonces, y aunque no fue dictada todavía la sentencia, trascendió que la banda asumió su responsabilidad ante la conducta ilícita y por ello recibirán penas cuya escala va de los 2 a los 10 años de prisión, sumado a inhabilitaciones para dos policías y multas para todos.
Las más altas les corresponden a la jefa de la banda, llamada "mae" umbanda o directamente la "curandera", Vanesa Marcela Saravia (36) y su esposo Martín Alejandro Albaristo (40). Ambos asumieron su responsabilidad en su rol de organizadores de almacenamiento y comercio de estupefacientes agravado por el número de personas; y como autores del delito de tenencia de drogas con fines de comercialización.
En un segundo nivel, Álvaro Nicolás Juriol (28) aceptó 4 años y 9 meses de cárcel como partícipe secundario del comercio de cocaína; mientras que Andrés Ángel Emanuel Aguiló (30), Kevin Leonardo Arce (28) y Guillermo Omar Paz (56) firmaron condenas por el mismo delito, pero a 4 años y 6 meses de encierro.
Archivo El Litoral La investigación explotó el 7 de noviembre de 2019, cuando se realizaron múltiples allanamientos con el secuestro más grande de cocaína del que se tenga memoria en la ciudad.
La investigación "explotó" el 7 de noviembre de 2019, cuando se realizaron múltiples allanamientos con el secuestro más grande de cocaína del que se tenga memoria en la ciudad. Foto: Archivo El Litoral
El último
Un caso particular fue el del sargento de policía Germán Héctor Dogañieri (45), quien tras varios días de negociaciones cerró su condena en 4 años y medio, más una inhabilitación para ejercer el cargo de diez años.
Un peldaño más abajo en la escala penal se ubica la policía Gabriela Guadalupe Cocuccio, cuya sanción será la de 4 años y 3 meses de cárcel y al igual que su camarada,la inhibición durante una década. A diferencia del resto, a Cocuccio le endilgaron haber facilitado el lugar que funcionó como centro de operaciones para el tráfico de cocaína, puesto que tuvo a su cargo el alquiler del inmueble de la calle Echagüe 6900, donde vivían los jefes de la banda.
En último puesto se encuentran Leonardo Javier Rivero (24) y Reinaldo Arsenio Wabeke, quienes serán condenados a 2 años de prisión como partícipes secundarios del delito de tenencia para el comercio de droga.
Las defensas
Del acto judicial llevado a cabo este lunes, participaron también los abogados particulares, Luis Carlos Rittiner, por la mayoría de los encausados (Saravia, Albaristo, Juriol, Arce y Wabeke). Por videoconferencia estuvieron los Dres. Enrique Sirio y Susana Zulkarneinuff (por Aguiló y Paz). La policía Cocuccio y Rivero contaron con la asistencia letrada de Ignacio Alfonso Garrone; y el sargento Dogañieri fue representado por Dionisio Ayala Fernández.
Fue justamente éste último quien declaró públicamente que "hoy (por el lunes) el juez Lauría aceptó el acuerdo propuesto por el fiscal Martín Suárez Faisal y las respectivas defensas, aceptando en forma individual toda y cada una de las penas a las que le dieron lectura durante la audiencia".
La investigación se inició en agosto de 2019, cuando efectivos de la Policía Antinarcóticos de Santa Fe recibieron un anónimo con información que vinculaba a Saravia con traficantes de cocaína vía Córdoba.
Tras realizar tareas de inteligencia, el fiscal federal Nº 1, Gustavo Onel, solicitó una serie de allanamientos al juez federal Nº 1, Reinaldo Rodríguez, los cuales se concretaron el 7 de noviembre de 2019. Según los investigadores, la banda estaba preparando un importante viaje para la distribución de la sustancia ilícita.
Ese día allanaron el templo umbanda de San Jerónimo al 7.800, en calle San José al 10.000 y en Echagüe al 6900, entre otros domicilios. También un garaje de calle Los Ceibos al 10.400, donde hallaron dentro de una Ford Ranger y un Jeep Patriot, más de 143 kilogramos de cocaína y una importante cantidad de dinero en efectivo, en pesos y dólares.
El juez Rodríguez procesó a la banda el 27 de noviembre de 2019 y a fines de agosto de 2020, el fiscal Onel solicitó la elevación a juicio. Un año después, el TOF fijó fecha de debate, pero las partes lograron acordar las condenas ya mencionadas.