El papa Francisco dijo hoy que es necesario "acompañar con misericordia" a divorciados, homosexuales y mujeres que hayan abortado, y señaló que evita hablar sobre estos temas porque exigen hacerlo "en un contexto" y no al modo de "doctrinas a imponer con insistencia".
Jorge Bergoglio lo afirmó en una extensa entrevista de 29 páginas a la publicación jesuita "Civiltá Cattolica" que fue dada a conocer hoy en Roma, según informó la agencia ANSA.
"Es necesario siempre considerar a la persona. Aquí entramos en el misterio del hombre. En la vida, Dios acompaña a las personas y nosotros debemos acompañarlas a partir de su condición. Es necesario acompañar con misericordia", dijo el Papa, al ser consultado sobre esos temas espinosos.
En ese marco, explicó que evita hablar sobre cuestiones como aborto, matrimonio homosexual y métodos anticonceptivos pues esos temas exigen hacerlo "en un contexto", y no al modo de "doctrinas a imponer con insistencia".
"No podemos insistir solo sobre las cuestiones vinculadas al aborto, el matrimonio homosexual y el uso de métodos anticonceptivos. Esto no es posible", dijo el Papa y agregó: "no hablo mucho de esas cosas, y por ello he sido cuestionado. Pero cuando se habla, se necesita hacerlo en un contexto".
"Una pastoral misionaria no está obsesionada con la transmisión desarticulada de una multitud de doctrinas a imponer con insistencia", añadió el pontífice argentino.
En el mismo sentido, pidió "misericordia" para la mujer que haya abortado y la situación "le pesa enormemente" y "está sinceramente arrepentida".
En otro tramo de la entrevista, en la que brindó importantes definiciones, el papa Bergoglio habló de su pasado en Argentina y dijo que "jamás" ha sido de "derechas".
"Mi forma autoritaria y rápida de tomar decisiones me ha llevado a tener problemas serios y a ser acusado de ultraconservador. Tuve un momento de gran crisis interior estando en Córdoba. No habré sido ciertamente como la beata Imelda, pero jamás he sido de derechas. Fue mi forma autoritaria de tomar decisiones la que me creó problemas", afirmó.
Ante otra consulta, Francisco dijo que desconfía siempre de su primera decisión, por lo que admitió que le lleva tiempo decidir, aun en materia de "reformas" dentro de la iglesia católica.
"Desconfío de las decisiones tomadas de forma improvisada. Desconfío siempre de la primera decisión, es decir de lo primero que me viene a la mente para hacer cuando debo tomar una decisión", sostuvo.
"La Iglesia es la totalidad del pueblo de Dios y con la que debemos "sentir" que es la casa de todos. No se trata de una pequeña capilla que contiene a un grupito de personas seleccionadas", afirmó.
"No debemos reducir el seno de la Iglesia universal a un nido protector de nuestra mediocridad", sostuvo el Papa durante la entrevista. (Télam)