Este lunes por la noche se produjo el esperado regreso a la televisión argentina de Gran Hermano, el reality show que reúne a un grupo de personas en el interior de una casa aislados por cuatro meses.
Este lunes por la noche se produjo el esperado regreso a la televisión argentina de Gran Hermano, el reality show que reúne a un grupo de personas en el interior de una casa aislados por cuatro meses.
Con la conducción de Santiago del Moro, en el inicio del programa se hizo la habitual presentación de los participantes con una mínima descripción de su perfil.
Luego, los llevaban en un vehículo hasta la casa en cuestión en donde eran recibidos por Wanda Nara y Robertito Funes, quienes les dieron las últimas indicaciones.
Con el correr de los minutos, los participantes empezaron a intercambiar historias y a conocerse entre sí. Una de las participantes es Romina Uhrig, quien fue diputada por el kirchnerismo.
"Me encanta la política, cuando fui diputada acompañé la Ley de cupo laboral trans, porque a mí me crio mi tía, que era travesti”, dijo en su clip de presentación.
“Me encanta entrenar, me cuido mucho, y realmente soy muy insegura conmigo misma. Me hice las lolas, la panza, cada tanto me pongo botox. Soy una persona de carácter, me dicen ‘mecha corta’, pero soy muy amiguera. En la casa voy a jugar, no voy a hacer amigos”, agregó.
Precisamente, a Romina no le perdonaron su afiliación partidaria y en la primera comida juntos le preguntaron "¿Cocinás polenta?", cuando ella contaba que le gustaba cocinar.